El cuerpo, caído en la estepa siberiana hace 15.000 años, acabó transformándose hace mil años en una figura en el Tíbet
28 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Un meteorito caído en la estepa siberiana hace 15.000 años que acaba transformándose hace mil años en una estatua budista y que fue robada del Tibet y llevada a Alemania por los nazis en 1938. Si a ello se añade que la estatua permaneció oculta en una colección privada y que solo salió a la luz cuando fue comprada en una subasta por un geólogo en el año 2007, la trama semeja más bien un guion de Hollywood. Pero es una historia real que acaba de desvelar el geólogo que la compró, Elmar Buchner, el mismo que analizó la pieza y que comprobó que la escultura había sido esculpida en un bloque proveniente de una ataxita, un tipo poco común de meteorito ferroso. Buchner publicó los resultados en una revista científica.