El escritor Christopher Andersen afirma que la Primera dama conocía todos los líos extramatrimoniales de su marido y no le importaban mientras ella no se viese perjudicada públicamente
07 ago 2013 . Actualizado a las 00:47 h.Han sido muchas las historias escritas acerca de la supuesta relación que, por aquel entonces, el presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy mantenía con la estrella de Hollywood Marilyn Monroe.
Ahora un nuevo libro del periodista estadounidense Christopher Andersen la convierte en el eje principal de «Estos días preciosos: el último año de Jack con Jackie». En estas páginas se relata como Monroe habría llamado a la Primera dama, Jackie Kennedy, para hablar de su relación con el presidente Kennedy. Las causas de este repentina confesión se deberían a la ilusión que la actriz tenía en su idilio, asegurándole, incluso, a Jackie que el presidente le había prometido que se casaría con ella.
Andersen relata el gran temor que tenía Jackie cuando llego a la Casa Blanca de no ver a su marido a causa de sus obligaciones como presidente. Pero compartir casa y oficina hizo que Jackie acabara por calificar esos años como «la época más feliz» de su vida.
Aún así, el escritor asegura que la Primera dama era consciente de la situación y de todas las mujeres con las que JFK había mantenido relaciones, peor que hacia la vista gorda siempre y cuando él no la pusiera en evidencia públicamente, pero también afirma que la aventura que más le dolió fue la que mantuvo su marido con Marylin Monroe. Esto se debía a que « Marilyn era una bomba de relojería que podía explotar en cualquier momento, provocando un escándalo que destruiría la reputación de su marido, destruiría su matrimonio y la expondría al escarnio público», argumenta el escritor.