Alberto y Charlene posan con sus hijos, una princesa Gabriela más despierta que el plácido futuro monarca, Jaime
24 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Trece días tardaron en aparecer los mellizos de Alberto y Charlene de Mónaco, aunque, como ella misma confesaba a la revista francesa Paris Match a la semana de dar a luz, «ellos son los jefes», los que marcan la agenda. Lo cierto es que los pequeños Gabriela y Jaime son eso, pequeños, siguiendo la lógica de los mellizos.
Las imágenes distribuidas por el principado, y al más puro estilo monegasco difundidas a través de Facebook, fueron tomadas todavía en la maternidad del hospital Princesa Gracia. En ellas se ve sobre todo a una madre primeriza, temerosa a la hora de coger y atender a sus hijos, y a un padre pletórico, más allá de los cargos que cada uno ostenta. Los bebés, por su parte, ejerciendo de tales: la niña, la princesa Gabriela, que desde su nacimiento es condesa de Carladès, aparece despierta en las fotos, incluso parece sonreír en alguna. En cambio, el heredero aunque segundo en el orden de nacimiento, el príncipe Jaime, marqués de Baux, estuvo toda la sesión en una serena siesta, propia de su condición real.
Posiblemente para mostrar una imagen más íntima y familiar, se escogió como marco de las fotos un salón de la maternidad, con sofá y hasta con árbol de Navidad escarchado, decorado con motivos en rojo, casi nórdicos, muy a juego con la camisa que llevaba el soberano monegasco. Su esposa, en cambio, se decidió por una blusa de seda beis con volantes.
Los mellizos -que iban vestidos con un abrigoso mono en rosa ácido y azul grisáceo, aunque por debajo asomaban los puños encaje- serán presentados oficialmente a sus vecinos de la Roca el próximo día 7 de enero, pero mientras tanto las fotos de ayer sirvieron para hacerse una idea de cómo son los bebés.