Manuel Regueiro: «Bolaño no va a dejar colgada a Marga»

b. p. l. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

«Serramoura» explorará la nueva relación entre padre e hija cuando esta última descubre algo de su progenitor que la dejará en «shock»

05 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La sargento Neira, de Serramoura, ha encontrado por fin a su padre biológico, pero el descubrimiento, más que liberarla, la ha dejado en shock. El portador de sus genes es Daniel Bolaño, que es, igual que ella, tozudo, meticuloso y buen profesional en lo suyo. Solo que lo suyo es el narcotráfico. «Es totalmente opuesto a Marga en valores, pero se parecen más que lo que creen», afirma el actor que lo encarna, el pontevedrés Manuel Regueiro, que se mueve entre la delincuencia de Serramoura, la cota de malla de El final del camino y el clasismo del coronel que interpreta en Acacias 38

«Para Marga, su padre sigue siendo Moncho, pero hay un antes y un después en su vida -explica Manuel Regueiro-. Bolaño ha estado vigilando a su hija en la sombra y, aunque es un narco con pocos escrúpulos, sí siente que Marga para él es especial. Vamos a ver en próximos capítulos una relación peculiar entre padre e hija» que va a evolucionar de un modo sorprendente para el espectador.

El intérprete avanza que, después de la muerte de Toño, no se avecinan buenos tiempos para la sargento de la Guardia Civil de Serramoura. «A partir de ahora, le van a empezar a pasar cosas bastante fuertes, pero Bolaño no va a dejar colgada a Marga. De momento él se ha escapado con el oro y está desaparecido, pero va a volver para ayudarla, aunque sus métodos no siempre sean los mejores».

Querer al personaje

Manuel Regueiro, que ya encarnó al turbio Esteban Garrido de Matalobos, asegura estar encantado con su papel de Daniel Bolaño. «Los malos son muy agradecidos, porque te permiten hacer cosas que en tu vida real no tienes a mano y buscar los recovecos de la gente. Un actor tiene que querer mucho a su personaje y, por malo que sea, buscar los motivos que lo han llevado a ser así». 

Además de Serramoura, el intérprete acaba de participar en la nueva producción de Voz Audiovisual, de la Corporación Voz de Galicia, para La 1 de TVE y TVG: El final del camino. En esta serie de acción y aventuras lució la cota de malla y la espada para interpretar al Conde Andrade, cuya muerte en el primer episodio fue «el detonante de muchas de las cosas que suceden después, porque desata el enfrentamiento entre Gonzalo de Catoira y Diego Peláez». «Este trabajo tiene sus cosas duras de preparación de personaje, de estudio, con clases de caballo y de lucha con espadas, pero hacerlo fue muy divertido -asegura-. El final del camino es un proyecto muy ambicioso, con un nivel que no tiene nada que envidiar a otras producciones españolas o extranjeras». 

«Andrade es de las figuras leales al rey, aunque a su manera, porque sobre todo es leal a la reina Constanza. Muere pronto, pero disfruté mucho el personaje», dice el actor, para quien Galicia es el lugar perfecto para una producción de estas características por sus «espectaculares exteriores naturales». «Vinieron muchos profesionales de fuera y alucinaron con la profesionalidad del equipo técnico, con el buen hacer de los actores gallegos que participan y con las localizaciones y los decorados naturales -explica-. Dejamos el listón bien alto, porque aquí hay gente muy profesional que sabe mucho de este oficio».

La sargento Neira, sospechosa por la desaparición de Inés

Los problemas para Marga no han hecho más que comenzar, y en el capítulo que se emite esta noche (Televisión de Galicia, 22.20 horas) se verá cómo la desaparición de Inés y los rastros de sangre en la casa de Toño la han puesto a ella en el punto de mira. Todos los indicios apuntan hacia la sargento de la Guardia Civil como principal sospechosa, aunque todavía los investigadores no saben a qué se están enfrentando. ¿Puede haber un asesinato si no hay cadáver? Por otro lado, en el cuartel tienen nuevas pistas sobre el caso de Fernando y parece que sus amigos han tenido algo que ver en su muerte. Diego y Quique tendrán que hacer un esfuerzo extra si quieren resolver la investigación.

Después de conseguir que Evaristo y Raquel rompiesen, doña Teresa está muy atareada impidiendo que el nuevo aserradero inicie su actividad, así que no dudará en usar todos los recursos a su alcance para evitar que Raquel y Gloria salgan adelante, lo cual afectará directamente a Fiúza.