«Sé lo que quiero. Y realmente sé lo que no quiero», aseguró la artista sobre su divorcio
12 oct 2021 . Actualizado a las 14:44 h.Adele saca nuevo trabajo y ante su lanzamiento ha realizado una entrevista a la revista Vogue en la que habla como nunca sobre su vida personal y profesional. De hecho, ambas cuestiones están íntimamente relacionadas: «Simplemente sentí que quería explicarle (a su hijo), con este álbum, para cuando sea mayor, quién soy y por qué elegí voluntariamente desmantelar toda su vida en busca de mi propia felicidad. A veces lo hacía realmente infeliz. Y esa es una herida real para mí que no sé si alguna vez podré sanar», afirma la cantante.
Por una vez, al cumplir los 30 años, decidió ponerse a ella misma primero. Ahora, a sus 33 años sabe lo que quiere pero, sobre todo, sabe lo que no quiere. Así, nació Easy on me, un trabajo muy personal que pretende responder a las preguntas de su pequeño Angelo, de nueve años, sobre su divorcio y sobre los problemas que esa separación pudo causarle, según recoge Colpisa.
«Tiene tantas preguntas sencillas para mí que no puedo responder porque no sé la respuesta. Como, ¿por qué no podemos seguir viviendo juntos? Eso no es lo que hace la gente cuando se divorcia. ¿Pero por qué no? Yo digo, no lo sé. Eso no es lo que hace la sociedad. Y: ¿Por qué ya no amas a mi papá? Y yo diría, amo a tu papá. Simplemente no estoy enamorada. No puedo hacer que eso tenga sentido para un niño de nueve años», explicó.
La ruptura con su marido coincidió con otra serie de acontecimientos y con la crisis de los 30 años, lo que le provocó una angustia que la llevó a practicar deporte asiduamente. Descubrió que el deporte le ayudaba con la ansiedad y le funcionaba para mantener el equilibrio emocional. «Hubo mucha meditación, mucha terapia, y pasé mucho tiempo sola», añadió.
Al final, llegaba a practicarlo entre dos y tres veces al día. Se convirtió en cierto modo en una adicta, pero también fue su salvación, y sin planteárselo como un modo de perder peso, la realidad es que cuando la cantante londinense volvió a aparecer públicamente, lo hizo con unos 45 kilos menos. «Me di cuenta de que cuando hacía ejercicio no tenía ansiedad. Nunca se trató de perder peso. Pensé que si podía hacer que mi cuerpo fuese físicamente fuerte, y puedo sentirlo y verlo, entonces tal vez algún día pueda hacer que mis emociones y mi mente sean físicamente fuertes», explicó.
Eso sí, el camino para recuperar la estabilidad emocional no fue un camino fácil ni rápido. «Pasaba una noche encantadora con mis amigos y luego me despertaba como si un tsunami viniera a por mí», reconoció. «Recuerdo estar sentada ahí afuera con dos de mis amigas y pensaba, ¿cuándo dejaré de sentirme así? Y ellas me decían que con el tiempo. Y yo les decía que sí, pero ¿cuánto tiempo?», declaró.