Alba García, diseñadora de joyas: «La reina es muy estilosa»

SOCIEDAD

Pilar Canicoba

Con solo 21 años ha creado una empresa con sus pendientes hechos de arcilla polimérica, un material ultraligero y muy dúctil

15 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Dicen que en el mundo hay dos tipos de personas: los que emprenden y los que no. Alba García (A Coruña, 2002) pertenece al primer grupo. Fabrica pendientes y los vende en una tienda virtual. Cuando puede, también cara a cara. Y le va bastante bien.

—Tiene 21 años y ya tiene una empresa. ¿Cómo se animó?

—Todo empezó como un hobby. Yo tengo interés por los trabajos manuales y cuando descubrí el material con el que trabajo, la arcilla polimérica, comencé a hacer pendientes. La gente de mi entorno me animó a crear una cuenta de Instagram, empecé a hacer fotos de los pendientes y así es como ha ido creciendo. Y luego yendo a mercados para darme a conocer.

—Es una empresa, al fin y al cabo.

—Sí, muy pequeña, porque solo la llevo yo.

—Usted vende por internet, pero también en las ferias, como toda la vida.

—Efectivamente. En mercados de artesanía.

—¿Qué funciona mejor?

—Los mercados, claro. Instagram es muy irregular. Se puede llegar a mucha gente, pero al final, en los mercados, donde mucha gente pasa por delante de tu puesto, haces muchas más ventas. Bueno, también depende mucho del mercado.

—Está usted sola, como le hagan un pedido grande, a ver cómo se arregla.

—A veces hay pedidos grandes, pero nunca tan abrumadores como para no poder atenderlos. Andas más apurada, pero es algo que me gusta.

—Todo lo hace usted.

—Sí, sí. Toda la producción, el moldeado, el pulido, la venta, las redes sociales, los envíos...

—¿Cuándo empezó?

—Hace un par de años.

—¿Y qué tal le va?

—Bien. Estoy contenta. Este fin de semana estaré en el mercado de San Agustín, en A Coruña que siempre funciona bien. La verdad es que la gente se interesa mucho porque es un material nuevo. Es una arcilla que moldeas, cortas y luego llevas al horno, donde se endurece. Y a partir de ahí hago toda la posproducción.

—Artesana a más no poder.

—Son muchas horas para sacar un par de pendientes.

—Y sigue estudiando.

—Sí, Gestión Industrial de la Moda en el campus de Ferrol. Estoy en el último curso.

—Ha aprendido rápido.

—Sí, sí, ja, ja. La carrera te anima a que emprendas.

—Burocracia, impuestos... Eso no la echó para atrás.

—No, no. Esa es la parte que más desanima, pero yo no la creé con la idea de tener la gran empresa de joyería. Ha sido un hobby que ha pasado a ser algo más. No esperaba que llegara a la dimensión que ha conseguido. Ahora le veo un futuro. Además, en los mercados he conocido a un montón de gente que se dedica a esto.

—Así que usted anima a emprender.

—Si algo te apasiona, sí. Si lo planificas bien, animo a hacerlo. Además ahora puedes empezar con una cuenta de Instagram o con plataformas que no suponen un gran coste. Es relativamente fácil arrancar.

—¿Diría que falta un poco de cultura del emprendimiento?

—En mi entorno, no. En mi carrera hay bastantes que lo están haciendo.

—¿Cuál es el sitio más lejano del que ha recibido encargos?

—De Suiza, aunque casi todos vienen de algún punto de España.

—¿Alguna vez vio a alguien por la calle con sus pendientes?

—Sí. Me ha ocurrido alguna vez y es una alegría muy grande. Ni se lo imagina.

—¿Le da para vivir?

—De momento estoy reinvirtiendo lo que gano en mi empresa.

—Dígame una firma de diseño que le guste.

—En moda, Jaquemus.

—Y un diseñador.

—Schiaparelli.

—Alguien con mucho estilo.

—La reina, desde luego. Es muy estilosa.

lvg

—Descartando a la reina, ¿a quién le enviaría unos pendientes para que los luciera y así vender más?

—A las influencers, es lo que tiene más impacto. Se los mandaría a Dulceida o María Pombo. Ahora mismo es lo que funciona. No lo voy a mandar a la tele.

—¿Celta o Dépor?

—Dépor, por supuesto, con carné y yendo a todos los partidos.

—Un mal año ¿eh?

—Da igual. Voy a seguir siendo del Dépor pase lo que pase.

—El tiempo libre lo dedica a...

—Cosas normales: pasear, ir en bicicleta, al cine... Cosas tranquilas.

—Defínase en pocas palabras.

—Trabajadora, positiva y apasionada por lo que hago.

—¿Le gusta cocinar?

—Nah. Me gusta la repostería.

—Dígame un lugar en el que sea feliz.

—En A Coruña soy muy feliz, pero la verdad es que soy más feliz viajando.

—Una canción

—Una de Coldplay. Son canciones muy alegres. Me gustan todas como banda sonora de la vida en general. Los vi en Coímbra y fue increíble.

—¿Qué diría que es lo más importante en la vida?

—Disfrutar de lo que haces y rodearte de gente que te aporte cosas.