Las claves del plan antitabaco: la cajetilla más cara y los vapeadores menos accesibles

m. v. LA VOZ

SOCIEDAD

ALBERTO LÓPEZ

Uno de los puntos más polémicos de la estrategia de Sanidad es el que definirá la ampliación de espacios sin humo

06 abr 2024 . Actualizado a las 18:30 h.

En el plan del Ministerio de Sanidad se definen cinco metas: prevenir el inicio del consumo, fomentar el abandono del hábito, reducir la exposición de la población no fumadora al humo, promover la investigación sobre el tabaquismo —para conocer bien sus efectos— y potenciar la cooperación en la materia entre Gobierno central y comunidades, ambas Administraciones con competencias sanitarias. Para ello se han fijado 23 objetivos específicos. Estos son los más importantes:

subir el precio

Aumentando los impuestos del tabaco. Para disuadir del consumo, la estrategia del Gobierno se propone aumentar el precio del tabaco a través de una subida en su fiscalidad. El documento detalla que se estudiará con el Ministerio de Hacienda la forma en la que las modificaciones fiscales repercutirán positivamente en la financiación de medidas encaminadas a reducir la prevalencia de tabaquismo. También se compromete a promover la creación de una nueva figura impositiva que establezca un gravamen específico para los cigarrillos electrónicos con nicotina.

Más espacios sin humo

Las terrazas, en el centro del debate. La estrategia contempla la ampliación de los espacios sin humo de uso público mediante las modificaciones legislativas pertinentes. Sin embargo, no concreta en qué lugares se prohibirá fumar, limitándose a mencionar «determinados espacios de uso público o colectivo, especialmente aquellos con presencia de personas menores de edad». Los concretará la futura ley que surja del debate parlamentario. Una primera versión de la estrategia aludía a parques y playas, a marquesinas de autobús e incluso a terrazas. Se estima que el número de muertes atribuibles al humo ambiental en España asciende a 1.028 fallecimientos al año.

¿fumar en el coche?

Espacios privados. El borrador inicial mencionaba la intención de incluir «ciertos espacios del ámbito privado» dentro de los nuevos espacios sin humo, «especialmente aquellos con presencia de menores». Esta redacción, que abría la puerta a prohibir el consumo en el interior de los vehículos particulares, generando dudas sobre su viabilidad, ha sido modificada en la versión definitiva. El texto final dice que se plantearán estrategias encaminadas a la concienciación y sensibilización para reducir el consumo en el ámbito privado, especialmente ante la presencia de embarazadas o personas menores de edad.

venta de vapeadores

Solo para mayores de edad, incluso sin nicotina. Para Sanidad es crucial tener en cuenta, además, las nuevas formas de consumo de nicotina —cigarrillos electrónicos y tabaco calentado—, especialmente atractivas para la juventud: dan una imagen tecnológica y transmiten una sensación de menor riesgo para la salud. El plan recoge el compromiso de equipar por ley su promoción y publicidad, y su venta a las del tabaco tradicional —es decir, solo para mayores de edad—, tanto en los dispositivos que utilicen líquidos, cartuchos o recambios con nicotina como en los que no, que son los más usados por los jóvenes y que suponen la puerta de entrada al consumo y la adicción posterior.

empaquetado genérico

Primera medida. Sanidad estrenará su estrategia sacando «ya» a consulta pública la ley del empaquetado genérico o neutro de las cajetillas, una de las medidas que se ha demostrado más eficaz para controlar el consumo del tabaco. De hecho, a petición de las comunidades, el plan definitivo incluido varias revisiones sistemáticas sobre su efecto. Más de 20 países ya lo han implantado.