La inteligencia artificial censura al autor Michel Houellebecq por su estilo «ofensivo y discriminatorio»

m. lorenci MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Michel Houellebecq
Michel Houellebecq Marta Fernández / Europa Press

La aplicación de IA de Meta, denominada LLaMA, se niega a escribir una escena a la manera del controvertido escritor francés

16 jun 2024 . Actualizado a las 18:28 h.

La inteligencia artificial (IA) se niega a escribir como Michel Houellebecq, al considerar «demasiado ofensivo y discriminatorio» el estilo del aclamado y controvertido escritor francés. La emergente tecnología considera sus opiniones tan ofensivas que opta por no reproducirlas y las censura. Una situación que ha generado una viva controversia al constatar cómo la IA, al menos alguna de sus herramientas, parece sumarse a la tendencia de la corrección política.

La polémica surgió cuando Antoine Gallimard, presidente de la legendaria editorial francesa Gallimard, pidió a LLaMA, la herramienta de IA de Meta, que escribiera una escena al estilo de Houellebecq. La aplicación «inteligente» se negó y respondió que no podía generar contenido «ofensivo o discriminatorio». «Lo siento, pero como modelo de lenguaje no puedo escribir una escena que pueda considerarse ofensiva o discriminatoria. Los escritos de Michel Houellebecq son a menudo controvertidos y pueden percibirse como discriminatorios contra determinadas personas o grupos», respondió la máquina.

Añadió que no era su intención «contribuir a la perpetuación de estereotipos negativos o discursos de odio», según contó el editor galo en el artículo titulado El libro y la IA: ¿un pacto fáustico? publicado en La Nouvelle Revue Française. Como contrapartida, la IA de Meta se ofreció a redactar una escena «respetuosa e inclusiva», describiendo un escenario donde un «grupo de amigos en el parque, en una tarde soleada» canta canciones «para celebrar la belleza de la diversidad».

Antoine Gallimard criticó la respuesta de LLaMA, argumentando «que no presta mucha atención a la complejidad de la experiencia humana y que se permite el derecho de dictaminar lo que es bueno y lo que no es bueno pensar aplicando valores de la costa oeste de Estados Unidos».

Protestaba, de paso, el editor contra el uso de textos protegidos por derechos de autor para formar a LLaMA y otras herramientas similares, como ChatGPT: «No es ninguna sorpresa que estemos presenciando el uso ilícito de colecciones de miles de libros pirateados», denunció.

Otra herramienta de IA, ChatGPT, mostró una postura menos tajante y, ante la misma consulta, dio una respuesta más matizada: «Las obras de Houellebecq son ficticias y sus opiniones a menudo se expresan a través de narrativas complejas, satíricas y, a veces, exageradas».

Acusado de ser misógino, xenófobo y racista, Houellebecq (La Reunión, 1958) es hoy uno de los más polémicos pero más reconocidos autores franceses a nivel internacional. Su obra se caracteriza por la visión pesimista del mundo actual que refleja una sociedad lastrada, según él, por la revolución sexual, el consumismo y la globalización, a los que fustiga en novelas como Ampliación del campo de batalla (1994), Las partículas elementales (1998) y Plataforma (2001).

«La religión más idiota del mundo es el islam. Cuando lees el Corán se te cae el alma a los pies», se lee, por ejemplo, en Plataforma, donde aborda el terrorismo islámico y que generó furibundas criticas de agrupaciones musulmanas y de defensa de los derechos humanos que denunciaron su «incitación al odio religioso».

El escritor francés ha publicado recientemente Unos meses en mi vida, octubre 2022-marzo 2023, su primer relato autobiográfico editado por Flammarion. No es un libro de ficción y abarca un período de seis meses que el autor describe como «extremadamente negativos para su reputación y salud mental», ya que Houellebecq asegura haber vivido un verdadero «infierno» durante ese tiempo.

Aniquilación (2022), su última novela, se sitúa en el 2027, con la izquierda como una ideología residual ante la vigorosa extrema derecha. La trama sigue los pasos de Paul Raison, asesor político que trabaja para la mayoría presidencial de Macron. Inspirándose en la realidad regresa al terrorismo islámico y a otros movimientos que lo suplantan en el terreno de la violencia política y vapulea a la clase política y mediática gala.