El anticiclón regresa a partir del lunes, pero el calor veraniego no asoma en el horizonte

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Un grupo de jóvenes caminan por el paseo de Cangas mientras observan la playa de Rodeira, completamente desierta bajo un cielo de nubes bajas.
Un grupo de jóvenes caminan por el paseo de Cangas mientras observan la playa de Rodeira, completamente desierta bajo un cielo de nubes bajas. XOAN CARLOS GIL

La Agencia Estatal de Meteorología no descarta que junio se pueda convertir en el primer mes con «carácter frío» en España desde abril del año 2022

27 jun 2024 . Actualizado a las 11:34 h.

Playas desiertas y chiringuitos vacíos. Es la definición gráfica de un verano que no acaba de arrancar en el aspecto meteorológico. En muchas localidades de las provincias occidentales, las máximas están teniendo grandes dificultades para superar los 23 grados debido a las influencias atlánticas. Además, por la tarde se une una inestabilidad que propicia intensos chaparrones y aparato eléctrico en el interior.

El tiempo atmosférico se está comportando muy por debajo de las expectativas. Los datos así lo avalan. Hace unos días la delegación gallega de la Agencia Estatal de Meteorología informó de que mayo fue el primer mes frío desde noviembre del 2021 en la comunidad. Ahora la Aemet reconoce que «junio del 2024 no se está caracterizado por un calor intenso y sostenido. Aunque hay bastante incertidumbre sobre la evolución de las temperaturas a partir de este jueves [hoy], no es descartable que acabe siendo el primer mes con carácter frío en España desde abril del 2022».

La previsión a corto plazo no resulta precisamente muy halagüeña. En las últimas horas ha irrumpido sin invitación una depresión aislada en niveles altos (dana). A pesar de que se trata de un tipo de bajas presiones difíciles de predecir, los modelos ya habían anunciado su formación la semana pasada, ofreciendo dos escenarios posibles. Al final, se ha cumplido el peor para los intereses de los gallegos. La dana está situada ahora mismo al oeste de Portugal, generando inestabilidad y promoviendo un descenso térmico en la mitad oeste. Si hubiese estado un poco más alejada de la Península, habría actuado en la dirección opuesta, impulsando aire cálido. De hecho, los episodios de temperaturas más extremas se producen cuando hay un anticiclón al norte y una dana al sur. Ocurrió, por ejemplo, en julio del 2022 y se registró la máxima más alta desde que existen datos climatológicos.

El pronóstico de MeteoGalicia para este jueves anuncia que la presencia de aire frío en las capas altas de la atmósfera todavía seguirá siendo fuente de inestabilidad. El cielo alternará nubes y claros, con chubascos por la tarde ocasionalmente tormentosos en el interior. Las temperaturas no experimentarán cambios significativos y seguirán con cifras discretas para la época del año, sobre todo en la costa. La previsión se repite mañana.

El fin de semana, el viento soplará del norte y, por momentos, de componente oeste. Está previsto que las nubes bajas que frenan la radiación solar sean persistentes y, en consecuencia, haya un nuevo descenso térmico significativo, sobre todo en los valores diurnos.

Imagen de un chiringuito vacío en la zona del faro de punta Cabalo, en A Illa de Arousa.
Imagen de un chiringuito vacío en la zona del faro de punta Cabalo, en A Illa de Arousa. Mónica Irago

Dana y vaguadas

No es la primera ni la segunda dana que afecta a Galicia. Desde hace un par de meses un carrusel de sistemas de bajas presiones que se descuelgan de la circulación general de la atmósfera ha estado promoviendo un ambiente húmedo. El origen reside en la configuración de la corriente en chorro, que en lugar de estar circulando por el extremo norte, como le correspondería en esta época del año, produce vaguadas o meandros descendentes de aire frío en el Atlántico Norte que alimentan a las borrascas.

Precisamente, en este escenario el que tiene menos protagonismo es el anticiclón de las Azores. El sistema de altas presiones se siente muy incómodo, al contrario de lo que sucedería si hubiera una dorsal o meandro ascendente de aire cálido. En ese caso, obtendría la energía suficiente para bloquear las influencias del Atlántico sobre la comunidad gallega.

Esta no será, por tanto, la semana en la que los gallegos podrán pasar dos días seguidos en la playa tomando el sol. Así que hay que fijar ya la atención en el medio plazo y comprobar los planes que tiene el anticiclón oceánico para Galicia tras el paso de la dana. En este sentido, hay una buena noticia y otra no tan positiva.

Las matemáticas de los modelos de predicción numérica sugieren que la próxima semana el sistema de altas presiones estará situado en el centro del Atlántico Norte con un peso de unos 1.030 milibares, suficiente para bloquear el paso de borrascas y, lo más importante, volver a canalizar su influencia a través del nordés. Si se cumple este pronóstico, a partir del lunes podría recuperarse la configuración típica del verano gallego, con algunas nubes en el extremo norte y con temperaturas más altas en la mitad sur.

Sin embargo, el abrazo anticiclónico será en forma de cuña. Es decir, no se va a situar al norte de la Península. Esto evitará que pueda producirse un notable ascenso térmico. Se puede esperar tiempo seco, pero no muy cálido. Por otra parte, el hecho de que las altas presiones no consigan remontar en latitud seguiría promoviendo una atmósfera muy cambiante.

Una semana fresca y de fuertes tormentas en el resto de España 

En el contexto meteorológico actual, alguien puede pensar que este tiempo tan inestable solo afecta a Galicia. La realidad es otra. La dana se está moviendo hacia el sur y a lo largo de la semana provocará un escenario perfecto para que se desarrolle una poderosa inestabilidad atmosférica.

En la jornada de hoy ya se esperan fuertes tormentas en el norte de Castilla y León, Asturias, Cantabria y el País Vasco. Mañana y pasado la depresión aislada en niveles altos se va a situar en el centro peninsular y las tormentas serán más generalizadas.

Tampoco está siendo un comienzo de verano caluroso en España, ni siquiera en las zonas donde el termómetro suele alcanzar valores extremos. Como el anticiclón no ha tenido la oportunidad de abrir las puertas de África, hasta el momento la estación está siendo muy suave e incluso con temperaturas por debajo de lo normal, igual que en el resto de la Península.

La previsión a medio plazo no contempla un cambio radical en el apartado térmico. De momento, no se atisba un episodio de altas temperaturas en el horizonte.