La Justicia entiende que la aplicación de mensajería es un aliado potencial para la comisión de delitos de fraude, contra menores o tráfico de drogas
25 ago 2024 . Actualizado a las 18:11 h.El fundador y director general de la plataforma de mensajería Telegram, Pavel Durov, ha sido detenido este sábado por la noche en Francia cuando bajaba de su avión privado en compañía de su esposa y su guardaespaldas y ha sido puesto bajo custodia policial, ha informado la cadena TF1 citando a fuentes de la investigación.
Durov, que había aterrizado en el aeropuerto de Le Bourget —cerca de París-— procedente de Azerbaiyán, ha sido arrestado por la Gendarmería de Transporte Aéreo (GTA) de acuerdo con una orden de detención emitida previamente por delitos relacionados con la aplicación de mensajería. En concreto, la Justicia entiende que Telegram es un aliado potencial para la comisión de delitos de fraude, contra menores o tráfico de drogas, entre otros, dadas las herramientas que ofrece, así como la falta de moderación en su uso y la escasa colaboración con las autoridades.
«Terminará en prisión preventiva, eso es seguro», han declarado a la mencionada cadena investigadores próximos al caso, que han juzgado que, «en su plataforma, (Durov) permitió que se cometieran innumerables delitos y no hizo nada para moderar o cooperar». Tras pasar a disposición policial este mismo sábado por la noche, es posible que se inicie ya una investigación preliminar contra el empresario, también fundador de la plataforma rusa de medios sociales VKontakte.
Durov ha logrado irritar por igual a Rusia y Occidente por negarse a colaborar con las autoridades para combatir la disensión política o el extremismo. «La humanidad necesita una plataforma neutral como Telegram que respeta la vida privada y la libertad de las personas. En realidad, no importa si Telegram es usada por la oposición o el partido en el poder. Las reglas son iguales para todas las partes. De esa forma, somos imparciales», aseguró Durov en una entrevista, como recoge Efe.
Telegram, que fue lanzada oficialmente en el 2013, roza los 1.000 millones de usuarios mensuales (350.000 nuevos clientes se apuntan diariamente), lo que la convierte en una herramienta de alcance global. «Quiero ser un tótem de internet», le dijo a su profesor al graduarse en un elitista liceo de San Petersburgo, donde también estudió el conocido matemático Grigori Perelmán.
Su primer paso en el mundo digital lo dio al ingresar en la facultad de Filología Inglesa de la antigua capital zarista. Creó una biblioteca virtual con los trabajos de los estudiantes para que estos pudieran ser consultados por otros alumnos (Durov.com).
En el 2006 fundó Vkontakte, el Facebook ruso, que se convirtió rápidamente en la principal red social en Rusia, lo que llamó la atención del Kremlin, presidido por un hombre de la era analógica —Vladímir Putin— que recela especialmente de internet, porque sabe cómo puede usarse. Bajo presiones, porque se negó a bloquear los grupos que organizaron en el 2011 las mayores protestas antigubernamentales desde la caída de la URSS, acabó vendiendo la plataforma en el 2014 a amigos del Kremlin.
Con el servicio de mensajería encriptada, Durov dio el salto a otra dimensión. A diferencia de WhatsApp, Telegram permite el acceso a mensajes desde diferentes dispositivos a la vez y compartir un número ilimitado de fotos, vídeos y archivos. Este poder acabó llevándolo al exilio en Dubái, desde donde controla su imperio.
En el 2018 el Kremlin decidió cerrar Telegram, pero las multitudinarias protestas en su defensa lo salvaron. Su secretismo, con la implementación de chats secretos que protegen la privacidad de los usuarios con un cifrado exclusivo y hasta 200.000 personas por grupo, ha convertido a Telegram en un instrumento muy atractivo para delincuentes y extremistas.
La red ha sido bloqueada en países como Irán a Indonesia o Tailandia, y sufrido restricciones y multas en España, Alemania, Brasil o Países Bajos.
Diputados y senadores rusos exigen su liberación
Diputados y senadores rusos piden liberación del empresario ruso Pavel Durov, informa Efe. «Ahora hay que sacarlo de la cárcel. Insto al ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, a que llame a las autoridades francesas a liberar a Pável Dúrov», aseguró en su canal de Telegram Vladislav Davankov, vicepresidente de la Duma, la cámara de diputados. Davankov subrayó que «difícilmente alguien ha hecho más por el desarrollo de los servicios digitales en Rusia y en el mundo». Él y otros cargos locales manifestaron sus sospechas de que la detención tenga una motivación política y busque acceder a información confidencial de los usuarios de Telegram. En opinión de Andréi Svintsov, subjefe de la comisión de Política Informativa de la Duma, Durov es víctima de Occidente, que quiere controlar «todos los recursos informativos del planeta».