
Los restos del huracán convertidos en borrasca se aproximarán mañana a la Península
25 sep 2025 . Actualizado a las 08:36 h.La temporada ciclónica en el Atlántico estaba siendo noticia hasta hace unos días por su escasa actividad. Desde mayo, cuando arrancó oficialmente, se han formado siete tormentas con nombre, de las cuales dos se convirtieron en huracanes. Un informe de la Universidad de Colorado (Estados Unidos) publicado a comienzos de septiembre sostiene que la atmósfera sobre el océano tropical ha estado este verano más seca de lo normal, algo que ha frenado la evaporación, el alimento de las tormentas tropicales.
El primer huracán del 2025 fue Erin y tuvo una influencia muy beneficiosa sobre Galicia. Nació el 11 de agosto frente a las costas de Cabo Verde y cruzó el Caribe y la costa este de Estados Unidos antes de tomar los vientos del oeste para poner rumbo a Europa. Mientras cruzaba el océano se transformó en una borrasca cuyo frente cruzó la comunidad gallega, aportando unas lluvias que fueron vitales para aliviar el peor verano de incendios.
El segundo huracán bautizado por el Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami, se llama Gabrielle y se formó en aguas del Atlántico tropical el 17 de septiembre. El día 19, en lugar de seguir la típica trayectoria hacia el Caribe, se desplazó hacia el nordeste y, además, empezó a ganar fuerza. Ayer ascendió a categoría 4 tras una rápida intensificación mientras pasaba por una zonas de aguas muy calientes, tal y como explicó en sus redes el especialista en meteorología Michael Lowry. «Es notable ver lo que los huracanes pueden hacer al atravesar aguas excepcionalmente cálidas. Gabrielle se fortaleció rápidamente a un huracán de categoría 4 hoy, justo al pasar sobre temperaturas superficiales del mar de récord para esta época del año». Después puso rumbo hacia la Península.
Este jueves está previsto que se sitúe al oeste de las Azores, donde ya esperan su impacto con una categoría menor, entre 1 y 2. A partir de mañana, tras cruzar el archipiélago portugués, asoma la incertidumbre sobre la trayectoria que tomará ya que va a interactuar con una vaguada o zona de aire frío de latitudes medias. «É precisamente nese momento cando o NHC pronostica que o sistema perda a categoría de furacán. Sen embargo, o ciclón non acabará de engancharse a esa vaguada o que fará que o proceso de extratropicalización se vexa frustrado», explica Damián Insua, Damián Insua, investigador del Laboratorio de Extremos Hidroclimáticos de la Universidad de Gante.
La extratropicalización es el proceso que permite que un huracán se transforme en una borrasca debido a las condiciones más hostiles que se encuentra a medida que sube desde de una latitud tropical a otra templada como, por ejemplo, aguas más gélidas. Sin embargo, la previsión es que Gabrielle mantenga ciertas características de un sistema tropical. «Tendrá unha estrutura cálida e convección cerca do centro. É o que coñecemos como ciclón híbrido», apunta Insua.
La naturaleza híbrida del fenómeno complica el trabajo de los modelos meteorológicos, poco acostumbrados a lidiar con este tipo de sistemas. «Nun caso deste estilo entran en xogo tanto os mecanismos que sosteñen as borrascas de latitudes medias coma os dos ciclóns tropicais, e a interacción entre todos estes procesos é moi difícil de representar polos modelos meteorolóxicos», sostiene. En estos momentos hay dos escenarios y habrá que esperar hasta última hora para saber cuál se impone.
Escenario 1
Tras interactuar con la zona de aire frío en altura, el ciclón se dirige directamente hacia Galicia y afectaría a la comunidad gallega durante el fin de semana. Habría lluvias intensas y fuertes vientos, aunque se descarta que pueda producir un gran temporal.
Escenario 2
La mayoría de los modelos coinciden en enviar el ciclón más hacia el sur. El sábado el centro del sistema de bajas presiones estaría localizado al oeste de Lisboa. En este caso, la comunidad gallega no se vería afectada. El sábado y el domingo se impondría en Galicia la influencia del anticiclón que se traduciría en tiempo seco y temperaturas muy agradables.