Otro niño sufrió complicaciones tras ser sedado por el anestesista de Alcira acusado de homicidio

Javier Martínez VALENCIA / COLPISA

SOCIEDAD

Cartel de la clínica dental donde fueron tratadas las menores afectadas en Alcira
Cartel de la clínica dental donde fueron tratadas las menores afectadas en Alcira EUROPA PRESS

La Policía investiga un tercer caso de supuesta imprudencia profesional en una clínica dental de Paterna que ha borrado de su web el nombre del especialista investigado

10 dic 2025 . Actualizado a las 09:47 h.

El anestesista investigado por la muerte de una niña en Alcira podría ser acusado de otro delito de lesiones tras las complicaciones de salud que sufrió otro menor poco después de que fuera sedado en una clínica dental de Paterna. De confirmase este caso serían ya tres las personas afectadas, todas ellas menores de edad, por la presunta imprudencia profesional del médico que anestesiaba a sus pacientes con fármacos sustraídos, presuntamente, en el Hospital de Manises.

El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional detuvo al anestesista el pasado 3 de diciembre tras registrar su domicilio y la clínica dental donde sedó a dos niñas de seis y cuatro años de edad. La primera falleció el 20 de noviembre, y la segunda resultó intoxicada y permaneció 12 días hospitalizada.

Durante su declaración ante la Policía, el médico explicó que había administrado tres fármacos a las menores por vía intravenosa, y que uno de esos medicamentos (denominado midazolam) lo había sustraído del Hospital de Manises, donde había trabajado hasta el mes de octubre.

Pero el especialista ejercía también en clínicas de Valencia, Paterna y Sagunto, por lo que la Policía y los inspectores de la Consellería de Sanidad extendieron sus pesquisas a estos centros médicos privados. Tras realizar las primeras averiguaciones, los investigadores no tardaron en averiguar que podría haber una tercera víctima, un niño cuya edad no ha trascendido.

El menor sufrió reacciones adversas tras ser sedado durante un tratamiento dental en una clínica de Paterna, y le administró los fármacos el mismo anestesista investigado por la muerte de la niña de Alzira.

Los inspectores revisaron las autorizaciones de este centro médico para constatar que cumple la normativa sanitaria, y también recabaron información sobre los fármacos sedantes que administraron al niño que luego sufrió complicaciones.

Las diligencias policiales sobre este tercer caso de supuesta imprudencia profesional del mismo anestesista ya han sido remitidas a la jueza de Alzira, la magistrada que acordó la libertad provisional del especialista. El propietario de la clínica de Paterna ha eludido realizar declaraciones sobre las complicaciones que sufrió el niño tras la sedación, y ha borrado de la web del centro médico el nombre y la foto del anestesista.

El foco de la investigación se centra en la praxis del anestesista y la actuación de la odontóloga propietaria de la clínica de Alcira, pero también en la trazabilidad de los fármacos utilizados en las sedaciones de los tres menores.

De hecho, la jueza considera que no existen suficientes indicios, por el momento, de que la causa definitiva de la muerte de una de las niñas «pueda ser atribuida exclusivamente a una imprudencia profesional» del médico investigado. Por ello, los inspectores de Sanidad tratan de determinar la calidad, origen y estado de conservación de los fármacos administrados en la clínica de Alcira.

Los inspectores de la Consellería de Sanidad han visitado en los últimos días varias clínicas donde el especialista ofrecía sus servicios, y siguen recopilando información y documentación que podría ser de interés para la investigación judicial. También han solicitado a los propietarios de estos centros médicos privados que revisen el historial de los pacientes atendidos por el anestesista para detectar posibles complicaciones tras la sedación, similares a las sufridas por las dos niñas afectadas, o quejas sobre el procedimiento que utilizó.

Poco después de que trascendiera el nombre del especialista investigado, un grupo hospitalario privado eliminó también de su página web cualquier rastro del mismo. Frases como «este vídeo no está disponible actualmente», la consulta que ha solicitado «no puede llevarse a cabo» o «no se han encontrado contenidos en el índice seleccionado» se repiten en las webs donde antes resaltaban la trayectoria profesional del anestesista.

Licenciado en Medicina por la Universitat de València en el 2006, el médico acusado de homicidio es un reconocido especialista en anestesia obstétrica y pediátrica, y tiene el título de Suficiencia Investigadora de la Universidad Autónoma de Barcelona. También es experto en sedación fuera del área quirúrgica, ventilación mecánica e intubación traqueal