A trabajar vigilados por cámaras, o al paro
El «Gran Hermano» pone en juego el derecho a la privacidad en la pesca y puede costar hasta 14.000 euros
REDACCIÓN / LA VOZ
Complicado brete el de trabajar vigilados permanentemente por cámaras o irse al paro. Sin alternativa, las autoridades han puesto bajo el foco del Gran Hermano a los pesqueros europeos. No será obligatorio en todos, aunque
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