ANTONIO GALA Además de Camilo José Cela -el escritor se enfrenta a una demanda judicial por plagio presentada por la escritora coruñesa Carmen Formoso-, otros narradores españoles de fuste han tenido que enfrentarse con acusaciones del mismo tipo.
19 mar 2001 . Actualizado a las 06:00 h.Así Antonio Gala fue acusado por Mercedes Formica, una autora encuadrada en la segunda división literaria, de haber fusilado párrafos enteros de sus textos para construir los guiones que el escritor andaluz realizó para el programa Paisajes con figura, producido y emitido por TVE. Además de Camilo José Cela -el escritor se enfrenta a una demanda judicial por plagio presentada por la escritora coruñesa Carmen Formoso-, otros narradores españoles de fuste han tenido que enfrentarse con acusaciones del mismo tipo. Carlos Fuentes, premio Cervantes, fue atacado duramente por el escritor Víctor Celorio como responsable de un plagio. Según la acusación, el fabulador mexicano se habría apropiado de la novela El unicornio azul para escribir Diana o la cazadora solitaria. Los plagios también habrían alcanzado a maestros del Siglo de Oro como Calderón de la Barca que, según el Diccionario de Literatura elaborado por Sainz de Robles, copió alguna de sus obras directamente de los textos firmados por Lope de Vega. Nadie se imaginaría a un genio como Jorge Luis Borges copiando una idea. Sin embargo, las malas lenguas llegaron a asegurar que el argentino había utilizado los libros de piratas escritos por Philip Gosse para escribir su Historia universal de la infamia. También Ramón María del Valle Inclán cayó bajo las flechas acusadoras del plagio. Julio Andrade demostró en un artículo publicado por un periódico coruñés que La cara de Dios había sido fotocopiada de Netochka Nezvanova, novela firmada por el ruso Fiodor Dostoievski.