«La Biblia: Reloaded»

TELEVISIÓN

31 mar 2013 . Actualizado a las 08:00 h.

Cuanta más televisión veo, más me gusta el cine. La servidumbre de la parrilla obliga a las cadenas a dilatar durante horas lo que podrían resolver deprisa y a liquidar en un plis plas los argumentos más aquilatados. Ahí está la serie que hoy concluye con la entrega La Biblia. El desenlace. Puestos a ser modernos, podrían haberla titulado La Biblia: Reloaded o mejor aún, La Biblia: Salvation, con permiso del cyborg de Schwarzenegger.

Los productores, ases del reality, han cogido el Antiguo y el Nuevo Testamento y se han puesto a disparar historias con lenguaje simplón y compás televisivo, como en un curso acelerado de experto técnico en sagradas escrituras.

La audiencia se ha volcado con este telefilme con aspiraciones de documental, dando por una vez la espalda a sus grandes tótems, como Gran hermano y ¡Mira quién salta! Ni haciéndolo mal, la gente es capaz de sustraerse a la fuerza de estos pasajes, porque, si uno consigue vencer el sopor ocasionado por la falta de ritmo, le queda el poso de haber aprendido algo más sobre los grandes temas bíblicos.

Pero ni el director de esta farsa es George Stevens, De Mille o Nicholas Ray ni este Jesucristo consigue estremecer tanto como la efigie perturbadora de Max Von Sydow, capaz, él sí, de conmover a un muerto.