Un punto para guardar

José M. Fernández

TORRE DE MARATHÓN

30 abr 2013 . Actualizado a las 11:47 h.

Queda tiempo, sobra vida. El Dépor volvió a ser fiel a sí mismo en el Benito Villamarín, con más fútbol del que han ofrecido sus compañeros de viaje en la lucha por eludir el descenso. Y ambición, porque el conjunto coruñés buscó el triunfo mientras este estuvo a su alcance y solo desistió cuando apareció la posibilidad de volverse de vacío. Ni medroso ni amarrón; el Dépor no jugó en el terreno del Betis como un equipo en apuros. Fue valiente, se adelantó en el marcador con un tanto de Riki para recordar y debió de solucionar el choque antes del descanso. No lo hizo y lo pagó en el inicio de la reanudación, por un error en el centro de la zaga, el único lunar serio que exhibió ayer el equipo de Fernando Vázquez.

Pero si el comportamiento del cuadro coruñés fue ejemplar hasta el descanso, se superó a sí mismo tras el empate: buscó el triunfo y dio la cara, hasta que Fernando Vázquez decidió apostar por sumar y abandonar la lotería de la peligrosa ida y vuelta, ya en los últimos diez minutos. Mejor un punto que la posibilidad de perder los tres.

El Dépor ha llegado al tramo final de la competición con argumentos, los que expuso ayer frente a un rival que lucha por Europa y los que ha puesto sobre la mesa en los seis últimos compromisos. Ahora quedan cinco partidos para enmendar los errores del pasado. El Dépor necesita insistir en la receta y minimizar los defectos defensivos. Ni cuentas ni favores. Por mucho que el Atlético, el Espanyol o la Real Sociedad ya hayan hecho los deberes, el equipo coruñés depende de sí mismo, de la confianza que da el haber sumado 14 de los últimos 18 puntos en juego. Aunque, eso sí, sin Silvio, Pizzi y Abel Aguilar frente al Atlético, a Fernando Vázquez le espera una semana de tensa reflexión.