En el fútbol todo es posible

TORRE DE MARATHÓN

21 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Cómo terminó el Celta-Almería?», se preguntaron anteanoche algunos celtistas que no esperaron a conocer el resultado. «Ganó el Almería por 1-0, de pura casualidad», fue la respuesta mayoritaria. De pura casualidad, no pasa de ser una verdad? a medias. Más cierto sería decir que el marcador fue adverso para el Celta por el fallo de Nolito en un penalti que hubiese, al menos momentáneamente, igualado el adverso 0-1 que ya no se movió. Y no se debió solo al error de Nolito, confirmando aquello de que un penalti lo puede fallar quien lo lanza. No vamos a recordar una vez más el de Chacho que, de marcarlo al Sevilla, hubiese evitado el descenso del Atlético Madrid, descenso que se evitó terminada la guerra en una de aquellas decisiones políticas del año 1939.

Las casualidades en el fútbol se resaltan cuando esa casualidad inclina la balanza a favor de uno, destacando al jugador que intervino, pero el elogio también puede convertirse en una crítica cuando lo falla. El fútbol no es como el boxeo, donde puede uno salir vencedor sin dejar k.o. al rival. El gol suele ser el k.o. No digo nada del Villarreal-Deportivo, cuyo resultado conoceremos al mediodía. La casualidad puede brindarnos una sorpresa navideña, según demostró el triunfo del Almería, en Balaídos.