
Si se acaba de plasmar la recuperacón de estos dos atacantes, tan solo Postiga, operado de la lumbociática, permanecería en la enfermería deportivista
10 mar 2015 . Actualizado a las 09:59 h.El frente de ataque del Dépor se refuerza para visitar el viernes (20.45 horas, Canal+ Liga y GolT) al Valencia. Salomão, a punto de recibir el alta médica después de volver a entrenarse ayer junto a sus compañeros, y Toché, quien está previsto que hoy se incorpore al entrenamiento junto a sus compañeros tras haber completado su última sesión de recuperación, podrían regresar a los planes de Víctor Fernández de cara a este encuentro. Si se acaba de plasmar la reincorporación de ambos, tan solo Postiga, que ya inició el tratamiento de fisioterapia tras ser operado de la lumbociática que padecía, permanecería en la enfermería deportivista.
El Deportivo se entrenó ayer por la tarde en Abegondo en una sesión en que la plantilla se dividió en dos grupos. Tras una larga charla del técnico maño a sus futbolistas, Luisinho, Sidnei, Lucas, Álex Bergantiños, Borges y Riera trabajaron al margen, mientras sus compañeros se empleaban a fondo en una serie de velocidad y resistencia culminada por un partidillo de ocho contra ocho que se prolongó durante unos cuarenta minutos.
A su término, Luisinho reconoció que el equipo coruñés debe recuperar el equilibrio entre la defensa y el ataque después de cuatro partidos sin conocer la victoria. «Sabemos que en esta categoría no podemos fallar tanto, pero estamos fallando. Somos conscientes de eso. No solo la defensa está fallando, porque el fútbol es un juego colectivo, en el que todos tenemos que atacar y que defender. Y es lo que tenemos que meter en la cabeza, porque esta Liga es muy competitiva y solo así, todos juntos, lograremos mantener al Dépor en Primera. Ese es el espíritu que tenemos que tener. Tenemos que ser solidarios dentro del campo y ya en el partido contra el Valencia trabajar más y tener un gran espíritu de sacrificio», señaló.
Pese a la mala racha actual, el lateral aseguró que en el vestuario no sienten más presión que antes. «La presión ya viene desde el inicio de Liga. Ya sabíamos íbamos a encontrarnos una Liga bastante difícil y ya sabíamos que esa presión iba a existir siempre. Ahora hay que tener confianza en esta plantilla y en todos. No hay que temer de nada, pero tenemos que ser responsables también. Ahora tenemos doce finales por delante y hay que fallar menos, porque el que falle más va a perder la categoría», añadió.