«Es imposible vivir en una ciudad como A Coruña y no ser feliz»

Alexandre Centeno Liste
alexandre centeno A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

Fichar por el Dépor ha permitido a la pareja formada por Jonás Gutiérrez y Alejandra Maglietti conocer una urbe en la que disfrutan de cada rincón

11 mar 2016 . Actualizado a las 18:35 h.

Tras superar su cáncer, salvar al Newcastle del descenso y ver cómo las urracas se lo agradecían no renovando su contrato, Jonás Gutiérrez encontró en A Coruña ese refugio en el que, aunque a cuentagotas, volver a disfrutar del fútbol. Ya no es el galgo imparable que recuerdan en Mallorca, pero ahora aporta otras virtudes, como la templanza y la fuerza. Celebra cada minuto que juega. Cada entrenamiento. Da gracias, cada mañana que se levanta y se prepara para ir a realizar su trabajo en Abegondo. Y, de vez en cuando, se permite el lujo de pasear por la ciudad con su pareja, Alejandra Maglietti. Es el caso de estos días, en los que la polifacética modelo argentina disfruta de una ciudad «que no conocía y me encanta». Tanto, que Jonás no renunciaría a seguir en A Coruña. «No estoy preocupado ahora por mi futuro, pero obvio que aquí estamos felices. Se vive bien y nos tratan bien. ¿Qué más se puede pedir?», comenta el jugador.

-¿Es difícil rehacer la vida después de lo que sufrió en Inglaterra y cómo acabó todo?

Jonás: -Hay que seguir mirando hacia delante. Las cosas en la vida pasan por algo. No hay que mirar atrás. Pasó lo que pasó y por eso estamos aquí y hay que festejar también esta oportunidad.

-¿Qué ha encontrado en A Coruña?

J: -Una ciudad muy linda en la que se come muy bien. Y en el Dépor he encontrado un grupo humano muy noble. El único problema son los últimos resultados que no están acompañando. Por eso nos da bronca. Pero el resto todo muy bien. Es imposible vivir en una ciudad como A Coruña y no ser feliz.

Alejandra (se ríe): -Jonás tiene razón. Es imposible no ser feliz aquí. Yo que vengo a poquito lo encuentro todo muy lindo. Las vistas son maravillosas. Sus playas. Me gusta pasear. Y qué decir de la comida. Es algo alucinante.

-¿Un lugar y una comida?

J: -Yo es que soy muy de estar en casa, pero cualquier sitio de la ciudad tiene su encanto. Vivo en Montrove y esa zona me encanta, pero insisto en que lo que es la ciudad en sí es también una maravilla.

A: -Me encanta la playa de Santa Cristina. Pasear por allí. Es porque quizá sea por donde más he estado. Pero el Paseo Marítimo, por donde el estadio, es precioso. Y hoy -por ayer- he conocido la plaza de María Pita, que me parece de una belleza divina. En cuanto a la comida... Toda (carcajada). Me gusta un montón cómo preparan la lubina, la empanada gallega, la picaña gallega, la tortilla... Puedo seguir si quiere (se ríe, de nuevo).

-¿Qué es más difícil ser el novio de una portada Playboy o la novia del ojito derecho de Maradona?

J: -Ah. Yo lo llevo muy bien. Para mí no es nada difícil. La admiro por cómo es como mujer, no solo en su faceta de modelo, sino como abogada, periodista... Luego, tiene la suerte de que su físico la acompaña y pues esas cosas son parte de su trabajo. He de decir que la portada es del 2006 y yo, que no la conocía entonces, la compré y aún la guardo.

A (lo interrumpe): -No hagas caso... Miente. No la tiene... Pero sí sé que no le incomoda mi trabajo. Y a mí su fama tampoco me ha trastocado. No me resultó muy difícil. Lo más complicado fue meterme en el mundo del fútbol, que no controlaba mucho. Ahora me voy aficionando... Pero solo a ver a sus equipos (más risas). Lo peor es cuando pierde y se tira cuatro días sin hablar... Pero ahora empiezo a comprender por qué suceden esas cosas. Vive el fútbol con pasión.

-¿Qué tiene que pasar para que la próxima temporada sigan disfrutando de la ciudad?

J: -No estoy preocupado ahora por mi futuro, pero obvio que aquí estamos felices. Se vive bien y nos tratan bien. ¿Qué más se puede pedir? Pero también soy consciente de que si no juego, es más difícil, aunque en esto del fútbol nunca se sabe, porque el año pasado también pensé que iba a participar menos y al final acabé jugando y marcando en la salvación. Habrá que esperar. Pero sí digo que estamos felices.

A: -Yo por mí firmaría ya (risas). El otro día disfruté de mi primer partido en Riazor y me quedé maravillada. Me encantó el estadio, el ambiente que había. Si es que cuando le digo que estoy muy contenta aquí con todo es por algo.

Una «panelista» licenciada en derecho y periodismo, en las instalaciones de La Voz

Nacida en Formosa, un pequeña ciudad del norte de Argentina, a poco más de dos horas en coche la capital paraguaya, Asunción, Alejandra Maglietti (27 de octubre de 1985) es a sus 30 años uno de los rostros más conocidos de la televisión de su país.

Participa cada día como panelista (así se conoce a los tertulianos en Argentina) en Bendita, uno de los programas estrellas de la televisión, con ya diez años en antena. Los sábados conduce un programa de coches Show sobre ruedas y debate en La noche.

Licenciada en derecho y periodismo, la fama le llegó con solo 20 años cuando protagonizó un anuncio de Doritos. «Fue una sensación. A raíz de ahí, comenzaron a llamarme para hacer más publicidad, revistas, posados...», recuerda. Luego llegó la portada de Playboy y un contrato con la prestigiosa agencia de modelos Leandro Rud. Hasta que la televisión llamó a su puerta y comenzó a acudir a diferentes programas. «Es un medio que me apasiona».

Ayer, Ale Maglietti visitó las instalaciones de La Voz de Galicia, en Sabón, en donde pudo disfrutar de una de sus pasiones, el periodismo. «Vivo enganchada todo el día a la actualidad. Soy de última hora. Estoy siempre con el celular mirando la última noticia que ha salido», explica. Es parte de su trabajo. «En Bendita hablamos de todos los temas de actualidad: deportes, mundo rosa, política... Lo que surja ese día».

Al mismo tiempo, no aparca su carrera de derecho. Tanto, que incluso participa activamente en la demanda interpuesta por Jonás contra el Newcastle por discriminación.