El centrocampista admitió que la dura derrota «nos ha tocado el orgullo»
22 abr 2016 . Actualizado a las 14:21 h.Rubén Gracia, Cani, centrocampista del Deportivo, ha asegurado este viernes que el 0-8 ante el FC Barcelona va a ser «duro toda la vida» para los jugadores que, como él, lo sufrieron en el césped, pero ha advertido de que les ha «tocado el orgullo» para la siguiente cita de la temporada, la de este sábado ante el Eibar en Ipurúa. «El resultado es durísimo, fue duro vivirlo y va a seguir siendo duro toda la vida porque no es agradable un 0-8. La parte positiva es que nos ha tocado el orgullo», comentó en rueda de prensa.
Cani valoró como «positiva» la visita del presidente del Deportivo, Tino Fernández, a los jugadores y el cuerpo técnico en la ciudad deportiva de Abegondo, donde intentó animarles tras la goleada histórica ante el Barcelona. «Dependemos de nosotros y es lo más importante. Si vamos a Eibar y ganamos nos olvidaremos. No nos puede hacer daño el 0-8 para Eibar», indicó.
El veterano futbolista afirmó que «mientras la permanencia no esté en la mano, hay que estar alerta» y abogó por sellarla en Ipurúa. «Tenemos en nuestra mano la salvación. En este partido, si conseguimos ganarlo, dejaremos de mirar otros resultados y partidos anteriores», dijo.
Además, recordó que la situación es «más complicada» para los equipos que «se encuentran más abajo» en la clasificación. «Pero hemos perdido un poquito el colchón que teníamos y si seguimos así nos meteríamos en más problemas, por lo que todos somos conscientes de la importancia del partido», opinó.
El jugador aragonés explicó que los deportivistas van a «poner todo» de su parte para conseguir el objetivo de la temporada ante un rival del que destacó el grupo. «Veo un equipo bastante compacto, un buen equipo, que ha hecho un poco como nosotros, una muy buena primera vuelta y una segunda un poco más floja. Destacaría a todo el equipo», dijo.
Cani restó trascendencia al hecho de que la temporada pasada el Eibar perdiera la categoría por un empate en la última jornada del Deportivo en el Camp Nou (2-2), aunque posteriormente la recuperara en los despachos por el descenso administrativo del Elche. «Lo vemos complicado como todos los de Primera, pero respecto a todo eso de que estén cabreados o no, nosotros también estamos cabreados del anterior partido, así que pelearemos cabreados todos. La mayoría de jugadores no estábamos aquí el año pasado ni ellos allí, es un partido de fútbol», sostuvo.