«Triple operación» para Carles Gil

Alexandre Centeno Liste
Alexandre Centeno A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

Podría no reaparecer hasta enero, después de que le inserten una malla mediante una laparoscopia y aprovechen la intervención quirúrgica posterior para actuar sobre toda la zona púbica y los aductores

07 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El quirófano aguarda por Carles Gil. Después de varios meses de tratamiento conservador, el futbolista de 24 años tendrá, finalmente, que someterse a métodos más agresivos. De esta manera, probablemente la próxima semana, se le realizará una laparoscopia con dos objetivos: comprobar el estado de toda la zona e insertar una malla, probablemente absorbible, que le ayudará en la recuperación y la cicatrización en el caso, casi seguro, de que la inspección aconseje la intervención quirúrgica.

Llegado ese momento, el período de recuperación estimado (no hay datos oficiales) será de unos 3 meses para que Mel lo pueda tener a sus órdenes. Diferente será el momento en el que considere que puede alinearlo, con lo que su reaparición podría demorarse hasta enero.

Una lesión complicada

El paso por el quirófano se debe a que el tratamiento conservador realizado hasta el momento no ha dado los resultados deseados. Las pubalgias, a diferencia de otro tipo de lesiones, no tienen un diagnóstico claro ni automático. Puede ser alta (se inflaman los músculos rectos anteriores del abdomen), baja (el daño se localiza a nivel muscular de los aductores) y mixta (cuando se conectan los músculos superiores e inferiores). Por este motivo, los especialistas suelen coincidir en que, antes de recurrir al quirófano, debe emplearse un tratamiento conservador que ayude a localizar el foco de la lesión.

En muchas ocasiones, la mayoría, este trabajo ayuda a recuperar al futbolista, pero no siempre sucede así. En ese momento, los médicos apuestan por el tratamiento más avanzado. En el caso de Carles Gil, se vio cómo, cuando parecía que afrontaba la recta final de su puesta a punto, volvió a resentirse (algo habitual en este tipo de dolencias) por lo que, tal y como anunció Mel el pasado martes, el club pasó a poner en marcha el plan B.

Varios procesos

En este sentido, salvo que la laparoscopia demuestre que solo tiene dañada la zona púbica izquierda, los médicos aprovecharán la intervención quirúrgica para retocar también la musculatura de la zona derecha, así como los tendones de los aductores. El objetivo es que una única operación y un único período de recuperación sean suficientes para que vuelva a jugar con total garantía.

El hecho de que este año sí sea propiedad del Deportivo (está cedido pero con opción de compra obligatoria) también ayuda a que el club haya adoptado la decisión de operarlo, pues en este tipo de lesiones no es práctico actuar así en caso de cedidos que han de retornar a sus clubes.

A la par que se le retocarán los músculos dañados, la laparoscopia servirá para insertar una malla -el propio organismo la reabsorberá pasadas unas semanas- cuya misión es reforzar la zona para que, a la hora del trabajo de fisioterapia, ayude a fortalecer la zona, a conseguir una cicatrización más rápida y a retrasar o evitar una futura recaída.