Carlos y Quique, dos pistoleros de récord

TORRE DE MARATHÓN

Marcos Míguez

Los 15 goles en 13 jornadas de Quique y Carlos Fernández tienen como antecedentes más cercanos a los anotados por Makaay y Djalma la temporada de la Liga y por Bebeto y Claudio en la 92-93

13 nov 2018 . Actualizado a las 08:34 h.

El abrazo que se dieron el pasado sábado Quique González y Carlos Fernández no fue un gesto más de compañerismo en la celebración de un gol. Fue un guiño de complicidad de dos futbolistas que se entienden dentro y fuera del campo, lo que les permite exhibir una compenetración extraordinaria. Fue el abrazo de dos goleadores que estaban firmando unos números que en las últimas tres décadas solo ilustres deportivistas pueden presumir de ellos.

Los quince goles cosechados por el vallisoletano y el sevillano después de solo trece jornadas disputadas sitúan a esta pareja de pistoleros entre las mejores de la historia reciente del Deportivo. Desde la temporada 1990-91, en la que el club logró el ascenso a Primera División, hasta la actualidad solo otros dos dúos fueron capaces de establecer estos registros, tanto en la máxima categoría como en Segunda División. Dos parejas de históricos blanquiazules que ponen todavía más en valor el registro de los actuales futbolistas.

El antecedente más cercano lo firmaron Roy Makaay y Djalminha la temporada de la Liga. En aquel ejercicio 1999/2000, el holandés terminó con 22 dianas y el brasileño con diez. Tras los trece primeros partidos, llevaban 8 y 7, respectivamente.

Siete años antes, la temporada del nacimiento del Superdépor, Bebeto y Claudio Barragán se repartieron también quince goles de la misma manera que este año Carlos y Quique. A la conclusión del campeonato, el astro brasileño acumuló 29 dianas en Liga, por 13 del valenciano.

Durante estos 28 ejercicios, pasaron por el Deportivo grandes goleadores que no llegaron a tener el arranque de estos dos al mismo tiempo. Por ejemplo, Roy Makaay, la temporada 2002-2003, en la que fue Bota de Oro, consiguió hacer diez tantos en estos primeros partidos, pero no se vio acompañado por el acierto de algún otro compañero. El más entonado fue Diego Tristán con 3 tantos. El algabeño acabaría la temporada firmando 9, veinte menos que su compañero holandés.

Otro que estuvo especialmente inspirado en las primeras semanas de competición fue Bebeto en la campaña 95-96. En este caso repitió, aunque sin la compañía de Claudio, sus números de tres años antes con 9 goles en 13 jornadas. Coincidió esta racha con los 5 que le hizo en un mismo partido al Albacete. Cinco tantos históricos porque cuatro los anotó en solo seis minutos. Toshack casi lo impide, ya que a punto estuvo de cambiarlo en dos ocasiones. Así lo recuerda todavía hoy el brasileño: «El míster me echó una bronca en el vestuario, delante de todos, porque había fallado un gol. Le expliqué que me había dado el sol en la cabeza y le dio un poco la risa. También la tomó con Fran. Hubo una pequeña discusión y casi nos deja a los dos en la caseta. Al acabar, después de marcar yo cuatro goles más y de la gran segunda parte que hizo Fran, le dije a Toshack: ‘Míster, si nos llega a cambiar, seguro que el Albacete habría empatado’. Le volvió a dar la risa».

Sin llegar a la altura de Bebeto, Makaay, Djalminha o Claudio, Quique González y Carlos Fernández van labrando su camino en el Deportivo con quince goles en estos primeros partidos, cifra que de continuar la progresión, algo harto difícil de predecir en el fútbol, les haría acabar la temporada con 29 y 19, respectivamente. El deportivismo lo firmaría.