Siempre va de frente

julio álvarez

TORRE DE MARATHÓN

OSCAR CELA

30 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Anquela es entrenador por pasión. Vive por y para el fútbol durante las 24 horas. Y es literal. Nunca descansa y siempre está pensando cómo mejorar y cómo hacer que su equipo compita mejor. Cuando coincidimos en el Numancia, y luego por lo que sé también en otros equipos por los que pasó, siempre nos repetía dos frases: «Hasta el último minuto del último partido» y «esta es la profesión más bonita del mundo». Es un entrenador de vestuario, de los que se apoyan en los veteranos y en sus futbolistas para defenderlos a muerte. Siempre pide más, pero también siempre va de frente. Con él fui elegido por dos veces seguidas mejor jugador de la Liga y, como equipo, destacamos como el que más goles marcamos de estrategia entre los principales campeonatos de Europa, así que para mí es una persona muy especial dentro y fuera de los banquillos. Recuerdo que la noche antes de un partido contra el Mirandés sufrí una diarrea terrible, pero yo para él jugaba siempre y a menudo los noventa minutos, así que entré en el once titular, pero lo cierto es que estaba fatal. En los últimos instantes del encuentro hubo una salida de un córner en la que el mediocentro rival estuvo a punto de marcarnos. Me encargaba de vigilarlo, tenía que estar encima de él, así que empezó a recriminármelo desde la banda. Y yo, que estaba casi deshidratado, prácticamente muerto, le contestaba también como me decía él, con insultos muy graves. Acabó el partido y los dos estábamos muy enfadados, pero vino junto de mí en el vestuario y nos abrazamos. Nos emocionamos y casi acabamos llorando. Repito: siempre va de frente, nunca se esconde.

Es un entrenador visceral e impulsivo, pero que sabe ganarse a la gente de su lado. Se ha formado en el fútbol, en el que lleva muchos años, pero también se ha tenido que renovar hasta convertirse en un entrenador actual. No se siente atado a un sistema de juego, aunque en su carrera ha jugado más con el 4-2-3-1 que con el 3-5-2 de esta última temporada. En Soria le gustaba jugar con un delantero muy claro de referencia y mucha asociación entre los mediapuntas en el centro del campo, mientras que la pasada campaña en el Oviedo tenía en la plantilla laterales largos y centrocampistas con poderío. Anquela está muy preparado y en el momento de explosión de su carrera.