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El técnico del Deportivo se pasó por rueda de prensa antes del duelo contra el Elche donde reconoció que el equipo tiene a día de hoy más defectos que virtudes
09 nov 2019 . Actualizado a las 14:58 h.Luis César se lleva a todos sus futbolistas disponibles además de a Mujaid al hotel donde el equipo se concentrará antes del duelo de mañana a las 12 de la mañana en Riazor. A falta de los dos descartes que el técnico tendrá que hacer para dejar la lista en 18, Somma es la gran novedad de la lista. «Lleva diez semanas sin estar con nosotros y es un futbolista importante. Veremos si mañana se viste o no, pero ya está entrenando con nosotros y practicamente tiene el alta médica. Falta la deportiva, que nosotros veamos que está en condiciones», dijo el arousano en la rueda de prensa previa.
Destacó Luis César la relevancia del choque contra el Elche. Un partido «muy importante», dijo hasta tres veces desde Abegondo y en el que trabaja para mentalizar a sus jugadores de que no puede poderles la ansiedad por querer llevarse los tres puntos recordando que los partidos se ganan en hora y media «no en 10, 15 o 20 minutos». «El destino es que a las dos de la tarde de mañana estemos todos contentos porque hemos batido a un rival», dijo el entrenador de los coruñeses que reconoció que tanto el equipo, como la afición, como el mismo, necesitan echarse un primer triunfo a la boca para poder pasar una semana tranquila.
Luis César ve brotes verdes y contó en sala de prensa que su experiencia le dice que mejorar es un proceso lento y doloroso, pero que da sus frutos. «A la plantilla la veo mejor», aseguraba el técnico. «Mejorar en fútbol es un proceso siempre duro. Exige práctica, entrenamiento, sentirse torpes y vulnerables. Pero yo creo que estamos en el camino correcto para conseguir esa mejora y que se traduzca en conseguir puntos de tres en tres. Es un proceso duro y es el precio que hay que pagar. Nada es gratis», explicaba. «Hay que mantener las virtudes que tengamos aunque sean pocas y perfeccionar los defectos. A dia de hoy tenemos más defectos que virtudes», decía resginado Luis César.
El técnico pasó de puntillas por las declaraciones de Christian Santos de esta semana, un tema que dio por enterrado y que no cree que tengan incidencia en el entorno. «Ni ayudan, ni restan. Esto es el mundo del fútbol. Declaraciones hay de todo tipo y ya está», dijo queriendo echar una palada más de tierra sobre la polémica. Al ourensano solo le interesaba el fútbol esta mañana. «Estamos concienciados de hacer un buen partido y de ganar acumulando virtudes y esfuerzos. Queremos darle a la afición lo que necesita, una vitoria y también a nosotros mismos», sentenció reconociendo que debía ser el equipo el encargado de prender la mecha en el estadio.