El objetivo de los 60 goles

Tito Ramallo

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

21 jun 2021 . Actualizado a las 10:20 h.

A la hora de pensar en delanteros para incorporar a un proyecto, no hay secretos: hay que tener en cuenta su capacidad goleadora a lo largo de una trayectoria y analizar su tendencia. Es decir, conocer la eficacia que está ofreciendo en las últimas temporadas para pronosticar cuántos goles marcará al año siguiente. Nunca es una ciencia exacta, pero si un jugador viene ofreciendo una cifra más o menos similar, sería lógico pensar que mantenga esa media. Sería menos habitual que si en las últimas temporadas no ha marcado, de repente logre diez, o que el que consiga diez, se quedase en ninguno. Quiles, el primer fichaje del Deportivo en ataque, viene avalado por los 13 goles que hizo el curso pasado. Para la campaña que viene puede llegar a 11 o 15, en función de su rendimiento y el contexto en el que va a jugar, pero si viene de meter 13, en una hipotética suma con sus compañeros ya partes con ellos.

Otro asunto es cuántos goles hacen falta para subir. No hay una cifra que garantice nada. En un contexto de 38 jornadas, 60 serían un buen punto de partida, es decir, alrededor de 1,5 por cada partido. Luego, no obstante, también hay que tener en cuenta la relación entre los tantos marcados y la fortaleza defensiva. O cuántos de esos han sido primeros goles, porque no todos tienen la misma importancia en puntos. Más que el número global hay que tener en cuenta su rentabilidad. Hay que buscar una punta de lanza de más de 20 tantos. En esta denominación hablamos de los dos o tres jugadores que forman esa posición, a los que habrá que añadir el acierto de los extremos y el centro del campo. Firmar gol es el primer paso para hacer del ascenso una realidad.