Ejercicio de impotencia de un conjunto blanquiazul que dominó sin premio al Rayo Majadahonda, sostenido por Lucho García frente a los intentos de Yeremay
09 oct 2022 . Actualizado a las 21:11 h.En ese cabezazo de Gorka Santamaría en el descuento no se esfumó un ascenso, como en aquellos de Martí y de Lapeña, pero volaron dos puntos indispensables para traer paz al nuevo proyecto. Aciago colofón a otro ejercicio de ese quiero y no puedo que amenaza ya la estabilidad del director de orquesta. Responsable de un grupo que lo intentó por todas las vías, especialmente tras el descanso, pero sigue falto de pegada y presa de los nervios.
Borja Jiménez quiso comprimir todas las urgencias en la versión más ofensiva del trivote, con Villares escoltando a Rubén Díez y Mario Soriano. Dos mediapuntas reciclados a interiores para convertir al único interior en ancla. Clara renuncia a un sistema de contención innecesario para llevar el peso del partido en el Cerro del Espino. El conjunto local, todavía en fase de adaptación al nuevo míster, no porfió el dominio de la medular y se instaló en torno a su área.
La receta de Alfredo Santaelena, habitualmente atrevido, fue la misma de otros conjuntos con recursos limitados a los que se ha medido el Dépor. Idéntica a la que tantos problemas ha causado por culpa de esa ceguera selectiva que impide a los futbolistas blanquiazules encontrar líneas de pase o atinar en el remate cuando se acercan a la portería contraria.
Al frontón del Rayo Majadahonda se fueron asomando por turno todos los futbolistas con vocación ofensiva alistados en los visitantes. Elenco que incluye al par de laterales, quienes apenas pisaron campo propio. Ninguno fue capaz de inquietar tanto a Lucho García como sus propios compañeros, empecinados en cesiones de alto riesgo.
El primer amago fue de Alberto Quiles, ubicado de inicio en punta. El segundo, de Kuki Zalazar, emplazado en esa banda derecha donde torció su carrera en Ponferrada. Con ambos conectó Rubén Díez, especialmente interesado en gobernar el duelo. El andaluz no llegó a chutar; el uruguayo lo hizo fuera.
Durante la primera media hora todo discurrió en terreno majariego, con los locales incapaces de hilar tres pases para superar la presión alta del Deportivo. Tan inocentes como los coruñeses en la zona decisiva. Demasiado torpe para llegar combinando, el Rayo probó en un par de ocasiones con centros lejanos, pero, como advirtió Borja en sala de prensa, ese recurso ya no da al oponente los réditos del curso pasado. Los escasos envíos no superaron a la zaga, bien plantada. Cansado de esperar para estrenarse, Edu Sousa salió casi hasta la frontal a neutralizar un balón llovido.
Una intervención de Edu Sousa
Calentamiento para la única acción que le exigió algo más que marcar territorio. A los 40 minutos, el atasco blanquiazul tuvo castigo en una contra. David Rodríguez alcanzó algo escorado distancia de disparo, acosado de cerca por Antoñito. El golpeo exigió al portero debutante estirar la pierna para el rechace. Tras ese susto llegó el descanso.
Ambos equipos aprovecharon la visita al vestuario para interiorizar su papel en el encuentro, y retornaron al césped con el anfitrión comprometido a sostener su muro y el visitante empeñado en buscarle grietas. Para entonces ya estaba Quiles en la derecha y Kuki en el centro. De Zalazar fue el primer chut a puerta, 48 minutos después de arrancar el encuentro.
No tuvo premio, como tampoco lo encontró el intento de Rubén Díez, desde muy lejos. El futbolista maño fue quien más se esmeró en prender luces y de una apertura suya a banda nació un buen centro de Antoñito que cazó Soriano en forma de volea. También con dirección equivocada. Perseveró Rubén y enseguida conectó con Kuki para que este cabeceara al palo.
En ese «uy» se agotó la aportación del uruguayo, reemplazado por Gorka Santamaría para el último cuarto de hora. Junto a él se sentó Quiles para ceder su plaza a Yeremay. Poco antes había salido Ibai Gómez por Narro. Los cambios de Borja Jiménez, buscando una victoria imprescindible, tuvieron impacto. A Ibai se le marchó por poco un disparo violento y Yeremay exigió un par de paradones a Lucho con la cita agonizando. La manopla de un ex para robarle al Dépor dos puntos que habrían valido al menos por unos días de calma.
Ficha técnica
Rayo Majadahonda, 0: Lucho; Aldalur, Ofoli, Casado, Pinillos; Mario García (Sergio Llamas, min 85), Salama, Albiach (Konate,min 61); Nando García (Donoso, min 75), David Rodríguez (Solomon, min 75), Alayeto.
Deportivo, 0: Sousa; Antoñito, Lapeña, Pablo Martínez, Carnero; Rubén Díez, Villares (Olabe, min 82), Soriano; Quiles (Yeremay, min 75), Kuki (Gorka, min 75), Narro (Ibai Gómez, min 67).
Árbitro: Etayo Herrera (comité vasco).
