Riazor es mucho Riazor

Carlos Brizzola

TORRE DE MARATHÓN

Imagen de la grada de Riazor en el Dépor-Fuenlabrada
Imagen de la grada de Riazor en el Dépor-Fuenlabrada CÉSAR QUIAN

10 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El Deportivo inclinó muy pronto el campo y se instaló en terreno contrario, pero el primer gol fue del Fuenlabrada, producto de un error en el pase en el círculo central. Pocas veces se ven goles de esta factura. Es a partir de ahí cuando el Deportivo dispuso de más paciencia para buscar la portería contraria. Tras el momentáneo empate (1-1), casi sin tiempo para el festejo, otro descuido defensivo permitió al rival volver a ponerse otra vez por delante. Este hubiera sido un palo más gordo del que fue si no hubiese aparecido Soriano para igualar muy pronto. Pero en todo momento el Deportivo mantuvo el partido muy inclinado y se veía que tarde o temprano, en cuanto dispusiese de efectividad, llegaría el tercero. El Dépor presumió de poder de reacción, que es muy importante, y generó muchas situaciones de gol, pero le faltó efectividad. También mostró muchos nervios, prisas y errores en los pases. Parecía que la intranquilidad por la situación en la tabla y las últimas derrotas fuera pasaban factura, pero también estaba la intención de ir a por el tercer gol.

Curiosamente, en la segunda parte al Dépor le faltó chispa hasta que entró Svensson. Su cambio fue clave, porque reactivó a sus compañeros. Además, dio ese punto más de presión que permitió a Lucas caer a la banda izquierda y tener un compañero más en el área. Así lo interpretó Lucas con un gran centro al segundo palo en el que encontró a Quiles para la remontada. Es verdad que luego aún llegaron por parte del Fuenlabrada ese contragolpe de Fer Ruiz y el disparo de Jara, pero una buena jugada de Pablo Martínez permitió a Lucas meter el cuarto.

Riazor es mucho Riazor. Ni el Fuenlabrada fue el mismo que sería si este partido se hubiera jugado en casa, ni el Deportivo hubiera tenido la misma energía para recuperarse dos veces. Pero en casa sí que dispuso de la capacidad suficiente para remontar y la fuerza necesaria para, tras el 2-2, marcar otros dos goles más. Fue un buen resultado, basado en una superioridad manifiesta, pero con sufrimiento también. Queda para el entrenamiento de esta semana mejorar el trabajo defensivo del 1-2, porque el Racing, próximo rival, también utiliza mucho ese recurso de los cambios de orientación y los pases en profundidad en busca de sus jugadores de banda. Es necesario cubrir muy bien las espaldas de los laterales para que no hagan daño. Riazor pesa en este equipo y esta categoría.