El calvario de Raúl Sánchez, estrella del Castellón, nacido de su vínculo con La isla de las tentaciones
TORRE DE MARATHÓN
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Denunció hace un mes que la televisiva Gal-la Mora, su exnovia, intentaba perjudicar su imagen ante los ultras y que eso le estaba afectando psicológicamente
10 jun 2023 . Actualizado a las 18:48 h.Todo comenzó hace un año. Raúl Sánchez (Madrid, 1997) jugaba en el Ibiza, en Segunda División, club en el que acababa de recalar después de firmar una estelar primera vuelta con el Majadahonda. Estando allí conoció a Gal-la Mora, una influencer que había alcanzado la popularidad gracias a su participación en La isla de las tentaciones. Un programa de televisión en el que las parejas ponen a prueba su fidelidad, compartiendo convivencias con personas solteras durante varios meses.
Gal-la salió de aquel reality show de Tele 5 sin pareja, tras romper con Nico Craiu, también exfutbolista (pasó por las canteras del Real Madrid, Villarreal y Rayo, entre otros).
«Al tiempo perdimos el contacto y un día cualquiera me salió en explora su cara, donde ponía que se había mudado a Castellón, donde yo vivo. Entonces le volví a escribir porque me pareció de lo más curioso», explicó Gal-la en una entrevista.
Aquellos primeros contactos fueron a más. Ambos publicaron imágenes en redes sociales, como en Navidad, poniendo el árbol juntos. Pero la relación sentimental no cuajó. «He estado pensando en cómo hacer esto y voy a dejar de pensarlo y a empezar a fluir. Mi relación de pareja ha terminado», escribió Gal-la en sus cuentas oficiales en el mes de marzo.
Y ahí comenzó el calvario de Raúl Sánchez. El jugador que esta temporada debía ser la estrella del proyecto del rival del Deportivo, después de que en verano su club pagara un traspaso de más de 100.000 euros por su fichaje, una cifra muy alta para esta categoría. El propio futbolista estalló hace un mes publicando una historia en Instagram, relatando todo lo que estaba sufriendo desde entonces. Confesaba que las secuelas le estaban pasando factura «psicológicamente», acusando a su exnovia y las amigas de esta de «intentar perjudicarle» para «enfrentarle a la afición».
«Me hacéis fotos en la discoteca cuando no puedo jugar el partido y se las pasáis a los ultras del Castellón», denunciaba. «Qué fácil es hablar detrás de una pantalla y contar tantas mentiras sabiendo el daño que puede hacer», lamentaba el extremo zurdo. «Yo creo que puedes dejar de hacer lo que estás haciendo y rehacer tu vida sin querer joderme la mía», añadía el jugador, que poco después perdería la titularidad en detrimento de Jeremy de León.