El Dépor Abanca gana al Alavés y Riazor presume de líder (2-1)

Sin hacer el encuentro más brillante de sus vidas, en un partido diseñado para cocerlo a fuego lento, y justo cuando peor lo estaba pasando, el Dépor Abanca resolvió para mantenerse líder de Primera Federación. Superó al Alavés (2-1) con dos goles en los últimos veinte minutos, en un Riazor que fue una fiesta, con casi siete mil espectadores en las gradas.

El Dépor Abanca fue a por el partido sin prisas. Controlando la ansiedad por el hecho de jugar en un escenario como Riazor y ante mucha más gente de lo habitual (6.822, según los datos sacados de los tornos del club). Así, las de Irene Ferreras se dedicaron a trenzar posesiones largas, dirigidas a buscar espacios y rupturas por los costados. Las dos primeras ocasiones llegaron a partir de las botas de Ayaka: una falta lateral que Raquel remató de forma acrobática (minuto 8); y un centro desde la derecha que Inés Altamira cabeceó suave a las manos de Sofía (18).

Las dos futbolistas más activas en el ataque coruñés fueron Millene y Ainhoa Marín. La brasileña probó fortuna en el 24 con un disparo alto con la zurda desde fuera del área que se fue alto; y repitió intento poco después tras una gran jugada de la catalana por la banda derecha (39).

El Alavés, por su parte, solo inquietó con disparos lejanos y con acciones a balón parado, como el cabezazo de Tresfield, a las manos de Yohana a la salida de un córner (44). La última antes del descanso fue blanquiazul, en un centro de Clara que Laurina remató y Sofía se estiró para salvar el gol (45).

El descanso no varió en exceso el plan del partido, aunque sí es verdad que se vio a un Alavés más ambicioso. Yohana tuvo que intervenir en un par de ocasiones, aunque sin ser muy claras,

Ferreras no lo veía claro y optó por dar un golpe de tuerca a su esquema. En el 63, sacrificó a una mediocentro (Ayaka) y añadió a una rematadora como ADT. Además, Samara reemplazó a una Cris que por entonces ya se tenía que medir con una extremo fresca como Rebeca Elloh. Y esas sustituciones acabaron siendo decisivas. Con el partido volcándose cada vez más hacia la grada de Pabellón, en donde atacaba el Alavés, el Dépor lo aprovechó para correr. Y en una de esas transiciones dio el golpe. Ainhoa Marín se fue al galope por la diestra, puso el centro al segundo palo y ahí llegó el gol. ADT remató en primer término y Millene se aprovechó del rechace para fusilar a Sofía (70).

El Dépor se creció y fue a por más. ADT cazó el segundo en otra jugada de insistencia (81) y Carrillo recortó distancias a la salida de un córner, de perfecto testarazo (88), para el 2-1 final.

---

---

---