Deportivismo en Alsacia

TORRE DE MARATHÓN

Salva Sevilla
Salva Sevilla PACO LARGO | LOF

04 dic 2023 . Actualizado a las 18:50 h.

Este fin de semana tocó apoyar desde la distancia y vivir el partido por la tele o el móvil, como muchos de los que no se acercaron al Johan Cruyff. Yo lo hice entre luces de colores, casas entramadas, villancicos y vino dulce, en concreto en Ribeauvillè, un pueblo de Alsacia conocido por sus mercados navideños, al igual que Colmar, Eguisheim o Estrasburgo, todos con mucho encanto. A las 17 horas ya era de noche, tenía la sensación de ser un partido que cerraba la jornada, como la semana pasada, y a las 17.30 tuve la sensación de que era el partido que cerraría la etapa Idiakez muy a mi pesar.

No fue así, Diego Villares lo quiere en el banquillo y sacó lo mejor de sí. No obstante, el propio míster ya le está dando los galones que le corresponden, ya no juega en función del que tiene al lado ni ocupando posiciones vacantes. Juega donde él es el mejor de la competición, pisando área, dirigiendo una presión sin balón asfixiante y, por supuesto, juega con su alegría habitual, de puntillitas, activo y en constante movimiento.

El descanso le vino bien a un equipo desbordado, triste y vacío. Con un empate que sabía a mucho se encaró una segunda parte en la que el único cambio fue jugador por jugador entre los canteranos y uno en el 94. Un claro mensaje a la dirección deportiva. Se habla de Yeremay, y de Davo. El primero, por la exigencia inmediata de la afición, que quiere verle en su mejor versión cuanto antes, y el segundo por su gol que vale tres puntos. Para eso vino, para atacar el espacio y marcar, no para recibir entre líneas o pegado a la banda para dar continuidad al juego. Ganamos y vale oro.

Inmediatamente después jugó el Arenteiro. Si Luis Chacón es mejor que Salva Sevilla, se dice y punto. Qué delicia de equipo, desde Diego García a Manín, qué ganas tienen de competir en esta categoría y disfrutar, jugadores que vienen de abajo, jugadores que pasaron años en Tercera. Cómo me alegro por ellos y por los míos.

Opinión: lo de Salva Sevilla no solo lo digo por el rendimiento, que no es el esperado, sino porque dentro del campo no es el veterano que necesita el equipo. Recriminar a compañeros no es el camino hacia el éxito y el liderazgo. Por cierto, el equipo necesita a Hugo Rama como el comer.