![Como en la imagen del partido del 2021, el Deportivo volverá a estar acompañado por su hinchada en el Reino de León](https://img.lavdg.com/sc/fXmMd57-UqICZS0IaW4cPZle1Y8=/480x/2024/01/13/00121705178161348514334/Foto/j19d1080.jpg)
Las visitas al feudo de la Cultural Leonesa han alterado la trayectoria de un conjunto blanquiazul que busca tres puntos clave mermado por las bajas
13 ene 2024 . Actualizado a las 21:41 h.El partido de Fuenlabrada no arrancó hasta las seis de la tarde; por eso, cuando Mario Soriano recibió el balón de Antoñito, el Deportivo aún tenía a tiro al Alcorcón. Los alfareros acabarían llevándose por goleada el derbi madrileño, pero eso aún no se sabía en el minuto 50 del duelo con la Cultural. Un cuarto de hora más tarde, la jornada había empezado a torcerse, como podía detectarse en la grada reservada para los visitantes del Reino. Óscar Cano, sin embargo, solo percibió en diferido el momento exacto en que cambió el viento, repasando el vídeo ante el televisor.
«La primera vez que hay unos pitos significativos es en León, y escuchando luego la narración de ese partido me doy cuenta de que minutos antes del ‘Cano dimisión', cuando Soriano falla la ocasión clara, el locutor dice que, de haber marcado, nos habríamos puesto líderes», compartiría semanas más tarde en una entrevista en La Voz.
Para entonces, el técnico andaluz había agotado casi todo el crédito que aún retenía aquel día del padre, cuando se subió al autobús para enfilar la AP-71, antes de remontar la A-6. No le resultó fácil ganar su asiento, perseguido por gritos que exigían su marcha e insultos variopintos lanzados por un puñado de radicales a quienes algunos jugadores intentaron (sin éxito) aplacar.
La inmediata victoria frente al Celta Fortuna en Riazor suavizó ligeramente el descontento, pero el germen de la ira contra el míster había quedado bien plantado, a la espera de cualquier accidente (como la derrota ante el Unionistas, de una jornada después) para rebrotar. En la visita al Reino se esfumaron juntas cualquier opción de liderato (no ha vuelto a tenerlo tan cerca el Dépor) y la paciencia con el entrenador andaluz.
El repaso a la trayectoria de la pasada campaña permite apreciar que la racha previa al infausto encuentro no era mala: ocho partidos sin perder. Siete acumula ahora el conjunto blanquiazul.
La dinámica, sin embargo, es distinta. Imanol Idiakez goza de mayor aceptación que Cano entre la hinchada coruñesa, el club parece apostar en serio por la estabilidad y aunque el primero queda mucho más lejos de lo que estaba entonces, vencer a la Cultural permitiría, seguramente, alcanzar zona de play off.
Se trata pues de recuperar el paso y afianzar la recién estrenada capacidad goleadora del frente de ataque, de lo que también hay precedente leonés incluyendo otro giro de guion. «Los resultados de los rivales nos metían presión y fuimos al rock and roll», desentrañaría para los medios desplazados Borja Jiménez, autor de esa propuesta que reunía cuatro piezas de clara vocación ofensiva (William de Camargo, Alberto Quiles, Miku y Noel) y se permitía además encomendarse a Juergen en la medular. La receta dio una fenomenal alegría para cerrar aquel 2021 en el que el Deportivo gobernaba la tabla, a una cómoda distancia del Racing de Santander.
Cada visita al Reino se ha convertido en punto de inflexión en este excesivamente largo tránsito por Primera Federación. La del domingo también lo será en caso de victoria que coloque a tiro a este adversario y al próximo en visitar Riazor, o de derrota que rompa una serie esperanzadora de jornadas sin caer.
Para afrontarla, Idiakez está obligado a una reforma, por culpa de la expulsión de José Ángel que le priva del ancla habitual. Tampoco podrá contar con Diego Villares, que causa baja por lesión. El de Samarugo tiene una difícil relación con el feudo de la Cultu, donde ya se había caído del once con Jiménez y Cano, siguiendo de lejos el momento del cambio en cada curso blanquiazul.
Barbero vuelve cuatro meses después y Puerto se estrena
Idiakez compuso una lista de veinte convocados en la que figuraron Iván Barbero y el recién incorporado Eric Puerto. El delantero puso fin así a cuatro meses de recuperación de su grave lesión de menisco, que lo apartó de los planes del Deportivo desde la cuarta jornada, cuando tuvo que pedir el cambio en el partido contra el Unionistas de Salamanca. Cuatro meses después, el jugador ha vuelto a entrenarse en esta semana al mismo ritmo que sus compañeros y ha figurado entre los elegidos para el encuentro que cierra la primera vuelta liguera. En principio será suplente, aunque el técnico, que elogió su valentía y ganas, no descartó que pudiese disfrutar de minutos en el Reino de León.
También estará en el banquillo el último en llegar, el portero Eric Puerto. El primer refuerzo invernal del Deportivo procede del Antequera, que pugna por acceder a las posiciones de ascenso en el grupo 2 de Primera Federación. Puerto llevará el dorsal 1, el mismo que llevaba Mackay hasta su salida.
Para el partido son bajas los lesionados Villares, Berto Cayarga, Pablo Valcarce, Retuerta y el canterano Martín Ochoa; además de José Ángel, sancionado con un partido por su expulsión frente a la Real Sociedad B.
Alineaciones
Cultural: Bañuz, Muguruza, Rodri, Fornos, Pol, Bicho, Barri, Presa, Aarón Rey, Solar y Escudero.
Deportivo: Germán, Paris Adot, Pablo Vázquez, Pablo Martínez, Balenziaga, Salva Sevilla, Jaime Sánchez, Rubén López, Davo, Yeremay y Lucas Pérez.
Árbitro: Pérez Hernández (Comité madrileño).
Horario: 18.00 horas, FEF TV.