Calca en el Ciutat de Valencia el despropósito de la pasada temporada en Irún; una cita que acabó convirtiendo en punto de inflexión
24 oct 2024 . Actualizado a las 22:48 h.La categoría arrancó antes, así que en esta campaña ha venido adelantado el punto de inflexión. Diez días de ventaja para ir asimilando la versión 2.0 del desaguisado de Irún. El nuevo modelo ha llegado además ya adaptado al fútbol profesional. Imanol Idiakez enfrascó aquella jornada (también la 11) en una frase: «Si pensamos que vamos a salir a pasear el escudo y la camiseta, lo tenemos jodido». Luego, la distribuyó en cada cita para convertirla en referente de todo cuanto había que evitar. Funcionó; o al menos el tiempo hizo encajar aquel 3-0 del Stadium Gal en el relato redondo de un ascenso, que incluyó además tres encuentros en los que se salvó por un pelo el cargo del entrenador.
El líder a las puertas reduce esta vez el margen para digerir lo sucedido en el Ciutat de Valencia y hay mucho que tragar. La diferencia en el marcador podrá camuflar el despropósito cuando se repase el curso años más tarde (2-0 se cayó en Córdoba, por ejemplo), pero lo sucedido se sumará seguro a la lista de derrotas memorables para quienes hayan presenciado el área local despoblada mientras Lucas Pérez se retrasaba o caía a banda a recibir; la tolerancia sonrojante con los remates del oponente a balón parado; la inconsistencia del invento en la medular o la falta de garantías en varias plazas de la necesaria segunda unidad.
El míster alejó la tentación de cargar el muerto a la principal novedad de este once de jueves, incrustado entre citas en Riazor. Charlie Patiño fue titular para descargar de responsabilidad al técnico por su demora en hacerlo debutar (siete minutos de un duelo resuelto en Albacete no es un debut). No está, como no estuvieron los cuatro grandes referentes ofensivos del proyecto coruñés. «Hasta ahora, el equipo no había dado síntomas como este. Espero que sea un accidente», reflexionó Idiakez en una comparecencia que puso la guinda a la lista de similitudes con lo sucedido hace un año. La sentencia buena de verdad tiene otro autor. «Yo aprendo mejor ganando», apuntó Pablo Vázquez en zona mixta. No le ve el central la gracia a los puntos de inflexión.