El ex entrenador del Barcelona y el técnico que más veces se enfrentó al conjunto coruñés analiza el duelo que disputarán ambos hoy en Riazor
26 oct 2024 . Actualizado a las 20:40 h.Es el entrenador que más veces se ha enfrentado al Liceo, durante diez años lo hizo como técnico del Barcelona. Además, defendió la elástica verdiblanca como jugador seis temporadas y una más ejerció de director deportivo. Fue el hombre que dio la alternativa a Juan Copa como entrenador. En aquel momento, un puesto temporal, en el 2011 entre la salida de Paco González y la llegada de José Querido. Carlos Figueroa (Sevilla, 1956), ahora entrenador del Bembibre de la OK Liga femenina, analiza un duelo que para él siempre está marcado en rojo en el calendario Un Liceo - Barcelona que se disputará este domingo a partir de las 12 horas (Palacio de los Deportes de Riazor, Hockey Global).
—¿Verá el partido?
—Por supuesto. Tengo que reconocer que ahora estoy más metido, como es lógico, en la dinámica del hockey femenino, pero este encuentro es de los que no te puedes perder.
—Traspiés al margen, el del Liceo el pasado fin de semana en Vic, ¿con los fichajes verdiblancos y las bajas azulgranas puede ser la OK Liga más igualada de los últimos años?
—Es cierto que el Barcelona ha tenido unas salidas muy importantes, como son las de Pau Bargalló y João Rodrigues. Pero ha incorporado jugadores de un altísimo nivel. Para mí, por presupuesto y por todo, el equipo azulgrana siempre parte como favorito. Otra cosa es que el sistema de play-off puede igualar la competición al final, si te sale bien. Pero a estas alturas hay un favorito que es el Barça y, luego, aspirantes como el Reus, el Noia o el Calafell, que acaba de fichar al seleccionador campeón del Mundo, y, obviamente, el principal, el Liceo.
—Un Liceo que, una vez más, ha tenido que reinventarse. En esta ocasión, para mejorar, pero cada temporada acostumbran a írsele los mejores. Usted lo vivió como rival.
—Sí, pero le voy a contar algo que muy poca gente sabe. Puede tirar de hemeroteca y ver que es así. El único jugador que el Barcelona le quitó al Liceo durante mi etapa como entrenador fue Carlitos López. Y porque lo teníamos planeado desde cinco años antes de ficharlo, porque yo lo veía el sustituto natural de Gabaldón. A mí, Villacorta [directivo responsable de la sección de hockey sobre patines] me tenía prohibido tocar jugadores de ahí, porque decía: «Si deshacemos el Liceo, ¿contra quién jugamos?».
—Partiendo de que usted tuvo a los mejores del mundo, ¿a qué jugadores de los que actuarán hoy ficharía?
—Curiosamente, tres coruñeses. Por parte del Barcelona, Alabart me parece un jugadorazo. Hace fácil lo difícil. Consigue pivotar sobre él el equipo; y Pablito Álvarez, que a pesar de su edad, me sigue pareciendo el mejor delantero del Mundo. En cuanto al Liceo, Carballeira, que vaya Mundial se marcó, y Dava Torres, que puede jugar donde quiera. Los dos tiene mucho mérito que sigan en A Coruña, porque tendrían sitio en cualquier equipo. Porque me pide dos, pero creo que habría muchos más que jugarían conmigo. Eso sí. Yo, reconozco, que tenía preferencia por los zurdos. En mis equipos eran casi todos así. Y ahora que me pregunta por individualidades, le contaré un caso. Ferran Font, que hoy está asentado en el Barcelona, lo tuve yo en el Vic y lo quise hacer debutar en OK Liga con solo 14 años. Sin embargo, la directiva no lo veía claro, pensaban que era muy niño. Pero le aseguro que iba a dar la talla.
«No sé si Copa querrá, pero para mí sería el seleccionador español ideal, aunque hay otros factores...»
Como jugador también hizo carrera, destacando principalmente en el Liceo, sin embargo, el puesto en el que más destacó siempre Carlos Figueroa fue en el de entrenador. Ahora está en el Bembibre femenino, «primero porque me engañaron —interviene— y ahora porque no me sé despegar de ahí». Desde su visión de entrenador analiza a ambos técnicos
«A Copita lo puse yo cuando estaba de director deportivo y echamos a Paco González. Recuerdo que el entonces presidente, Eduardo Lamas, me dijo: ‘‘Carlos, ponte tú con él que quizá esté verde...''. Así fue. El caso es que al segundo entreno, Juan me dice: ‘‘Si voy a llevar yo al equipo, ¿lo normal no es que entrene yo?'' Y tenía toda la razón. No volví. Sus números están ahí. No sé si querrá, pero para mi sería el seleccionador español ideal, pero hay otros factores... En cuanto a David Cáceres es de la nueva hornada de entrenadores, que practican un hockey más vivaz, menos estudiado, pero si el Barcelona lo eligió es porque lo ve preparado. Creo que lo está».
—Habla de Copa como futurible seleccionador, ¿es la espina que le ha quedado clavada a usted?
—Bueno, yo lo fui un día (se ríe). No recuerdo por qué hubo un torneo en Francia y formé una selección con jugadores del Liceo y Barcelona. Pero, no, no me quedó esa espina. Si quiere que sea sincero, sí me tocó que no me hubieran llamado para dirigir la femenina. No sé, me habría hecho ilusión. Pero, ya le digo que estoy aquí en Bembibre muy feliz. Eso sí, sigo teniendo mi casa en Fisterra, eh.