Sonae quiso comprar la cadena de 52 establecimientos cuando adquirió la firma viguesa Pizzamovil La multinacional de origen catalán, Pizzasapri, que controla 52 pizzerías propias y franquiciadas en España, Rumanía y Ucrania ha entablado negociaciones en Vigo para extenderse a diversos puntos de Galicia. El primer intento de entrada consistió en adquirir Hobs Pizza, una pequeña cadena de locales de la comarca de Lemos. Sin embargo estas negociaciones no dieron fruto y Pizzasapri aprovechó la feria Franquiatlántica para buscar socios gallegos. Es la respuesta a la ofensiva de Sonae en Vigo.
06 feb 2002 . Actualizado a las 06:00 h.Ibersol, el líder portugués de la restauración lusa dio un gran bocado al negocio de las pizzerías en Galicia al adquirir en diciembre de 2000 la mayoría de Vidisco, la empresa viguesa propietaria de Pizzamóvil, líder del sector en la comunidad. Pero las ambiciones de Ibersol eran mayores y ahora se ha sabido que intentaron comprar la cadena catalana Pizzasapri y la monfortina Hobs Pizza. Pero las partes no llegaron a un acuerdo. Los catalanes han decidido contratacar en Galicia, una autonomía en la que aún no tienen presencia. De ahí que Jesús Granados, director del área de expansión de la cadena estuviese recientemente en la feria viguesa Franquiatlántico negociando su entrada en el mercado gallego. Granados dice que «han transcurrido pocos días por lo que no se ha llegado todavía a ningún acuerdo. Hemos hablado con muchos interesados pero el mercado gallego es difícil». La compañía asegura que su gran diferencia con otras cadenas es que no utilizan masas congeladas. Pizzasapri facturó durante el pasado año 2.500 millones de pesetas (15.025.302,61 euros) y en su carta figuran productos curiosos como el «helado Homer Simpson».