Los «milagros» de Zacatecoluca

Xulio Vázquez VIGO/LA VOZ.

VIGO

El podólogo vigués David Cid estuvo en El Salvador operando de forma gratuita a niños con pie equinovaro, una patología congénita que les impide caminar

21 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El pintor tenebrista del barroco español José de Ribera plasmó en uno de sus lienzos a un niño con el pie varo, conocido también como El patizambo . Se conserva en el museo parisino del Louvre. Entre los personajes notables que han padecido esta patología figuran el poeta británico Lord Byron y el cineasta David Lynch. Pero incluso el futbolista de la selección inglesa Steven Gerrard, pretendido por el Real Madrid, también nació con esa deformación. Está claro que la corrigió, de lo contrario, no hubiese podido jugar tan bien al fútbol.

Sin embargo, no tienen tanta suerte muchos niños en El Salvador, porque allí son legión los que sufren esta enfermedad del pie equinovaro. Al menos desde hace dos años en la ciudad de Zacatecoluca (capital del departamento de La Paz) se opera el «milagro» de que algunos de estos muchachos puedan recuperar la sonrisa a la vez que su movilidad. Es por obra y gracia de contados podólogos altruistas, como es el caso del vigués David Cid Simal, quien abandonó la consulta durante una semana en su clínica podológica O Pé (en el número 10 de la calle Pintor Colmeiro) para intervenir a una docena de ellos.

Cid Simal pertenece a la asociación Agrupación de Clínicas del Pie y colabora con la oenegé norteamericana Children's Health en acciones humanitarias. «Nosotros fuimos invitados a participar en esta misión en El Salvador, aunque pagamos de nuestro bolsillo los gastos del viaje, lo que nos supuso un desembolso de unos 3.000 euros. Pero la gratificación de que estos niños puedan volver a caminar no hay dinero que lo pague», afirma.

Dice que este año (hace apenas un mes) valoraron a 115 niños, lo que supuso diez más que en el anterior. «La pena es que estaban para operar casi el 90%, pero solo pudimos intervenir a 30, debido a la falta de tiempo y de medios económicos. Estuvimos desde el pasado día 30 de abril al 8 de mayo. En la gran mayoría de sus patologías se trata de pie equinovaro. Es una deformación muy importante, que ya se origina en el parto. Es como si lo tuviesen torcido o invertido hacia abajo. Se apoyan casi en el tobillo para caminar con una enorme dificultad, incluso muchos no pueden hacerlo», argumenta.

«Acudimos a la localidad de Zacatecoluca, donde este tipo de problemas es ya endémico. Nosotros operamos a niños de entre 2 y 16 años, porque en estas misiones lo que hacemos es cirugía pediátrica. Eramos un grupo de 27 podólogos, 24 americanos y tres españoles. Yo hice intervenciones todos los días. Era atender un caso tras otro, con una dedicación mínima de dos a tres horas en el quirófano. Creo que operé a una docena de niños, aunque me duele no haber podido intervenir a más», explica.

También les ayudaron enfermeras de la zona, pero dice que fue en condiciones precarias.