El BNG decide hoy si abandona a Caballero

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO

La asamblea de militantes afronta esta noche una decisión crucial para los nacionalistas

01 jun 2011 . Actualizado a las 16:49 h.

En la oposición hace mucho frío, pero en el seno del gobierno tampoco necesariamente luce el sol. Esto lo sabe bien el BNG que, tras cuatro años en coalición con el PSOE, ha visto evaporarse el 40% de su respaldo electoral, más de 11.000 votos cuya recuperación se ha convertido en una obsesión para los nacionalistas. Y llueve sobre mojado ya que en la anterior etapa, tras romper el gobierno presidido por Ventura Pérez Mariño que encumbró a la alcaldía a Corina Porro, habían perdido otros dos ediles.

A partir de las ocho de la tarde los militantes del Bloque están convocados en el hotel Coia para decidir si finalmente asumen un nuevo pacto o se pasan a la oposición. En la primera opción confía Caballero para seguir gobernando con estabilidad y con tranquilidad tras el éxito personal que obtuvo el 22-M al subir en votos y con dos nuevos concejales pese a la debacle generalizada de los socialistas en todo el país.

Otra cosa es que tal posibilidad sea beneficiosa para el Bloque, que debe optar entre renunciar a la gestión de una parte de las concejalías, a parte de sus asesores y a los medios materiales (despachos y otras prebendas) que lleva aparejado formar parte del gobierno de una ciudad como Vigo.

Adiós a la Tenencia

El principal damnificado por salir del gobierno sería sin duda Santiago Domínguez Olveira, teniente de alcalde desde 2007, un cargo que incluye un despacho, coche oficial y un gabinete propio que tiene su sede en un lateral de la primera planta del Concello.

Si el Bloque forma parte de la oposición con los populares Domínguez sería un concejal más en su calidad de portavoz nacionalista, con una modesta oficina en la planta octava, donde tienen sus sedes los grupos políticos. Allí también recalarían Iolanda Veloso y Xabier Alonso, que con Domínguez conforman el exiguo grupo municipal surgido de las elecciones. En despachos anexos estarían los trece concejales del PP, que con los tres del Bloque conformarían una oposición con clara mayoría en el seno de la corporación viguesa.

Una situación de este tipo obligaría al alcalde Caballero a negociar de inmediato con toda la oposición o con alguno de los dos grupos para tener mayoría absoluta en el pleno organizativo, que forzosamente debe celebrarse en el plazo de un mes a partir de la constitución de la corporación. En dicha sesión se establecen asuntos claves para un Concello, tales como el número de concejales liberados, sus sueldos, cifra de asesores y asuntos de esta índole.

Acuerdo imprescindible

En el caso de Vigo los grupos normalmente logran un pacto sobre la base de una cifra elevada de asesores y liberados, lo que elimina la discusión en este campo. De hecho, la mayor parte de los ediles del actual gobierno se encuentran en esta situación y también varios de la oposición popular. Igualmente, todos los grupos cuentan con una decena de asesores.

Si el Bloque pacta con el PSOE y se conforma un nuevo gobierno de coalición la situación será bien diferente. Ambos grupos pactarían la nueva estructura, el reparto de concejalías y el sistema de funcionamiento. Lo hicieron hace cuatro años y ambas partes se garantizaron una amplia autonomía en sus respectivas áreas.

Pese a ello, en el Bloque se han quejado durante todo el mandato de las injerencias de Caballero en sus competencias y de numerosos problemas generados por el presidencialismo del alcalde. La respuesta habitual de los nacionalistas fue poner sordina a las crisis para no debilitar al gobierno, una actitud que los electores sancionaron premiando al PSOE y castigando al Bloque. Los afiliados del BNG decidirán hoy si persisten en esta vía o inician otra nueva.