Se libra de la cárcel porque demolió él mismo su chalé

e.v.pita VIGO / LA VOZ

VIGO

La acusación pide que el implicado deje el solar como estaba

21 oct 2011 . Actualizado a las 11:50 h.

Un vecino de Trasmañó, en Redondela, se libró ayer de ir a la cárcel porque, en el juicio en Vigo, probó que acababa de demoler su chalé y rebajar un muro ilegales. El fiscal reconoció que había reparado los daños ocasionados a la ordenación del territorio y redujo su petición de cárcel hasta los 18 meses, lo que en la práctica significa que, si no tiene antecedentes, no tendrá que ingresar en prisión si es condenado. La vista se celebró ayer en el juzgado de lo Penal número 3 de Vigo.

La Fiscalía sostiene que Basilio C.R. comenzó con un galpón y poco a poco levantó sin licencia una casa en medio del monte y a pesar de que el Concello paralizó las obras de la planta baja en el 2006 y abrió un expediente. El vecino alega que tenía varias casas cerca pero los expertos replican que son anteriores a la reforma legal de 1988.

Tres años después, en el 2009, los agentes del Seprona fotografiaron a tres obreros en plena faena que echaban la placa de hormigón en la terraza exterior del último piso de la casa. «Ía investindo de mil euros en mil euros e así fun facendo a casa», admitió ayer el vecino.

El implicado alegó que ignoraba que su finca era un terreno rústico, situado cerca del río Fondón, que no se podía urbanizar. También dijo que el Concello de Redondela nunca le había precintado la obra y que solo se enteró de que había cometido una irregularidad cuando levantó un muro de 1,80 metros, y que ahora rebajó a 1,20 metros.

El fiscal rebajó su petición de castigo por un supuesto delito contra la ordenación del territorio porque el imputado reparó los daños ocasionados. Ahora, el Ministerio Público solo le pide año y medio de cárcel por lo que, al carecer de antecedentes, no tendrá que ingresar en prisión si el juez le condena. Además, la acusación pública pide que pague una multa de 15 meses (entre 2.500 y 4.000 euros) y que deje el solar rústico donde asentó su casa como estaba hace diez años, sin desmontes.

En el juicio también se sentaron en el banquillo dos hermanos que fueron pillados cuando construían la adicción de una planta. El jefe alega que pidió al cliente la copia de la licencia pero «algunos la entregan después; él me enseñó un plano del forjado y no voy a desconfiar».