Tomiño y Cerveira proyectan un gran europarque a través de un nuevo puente

Luis Carlos Llera Llorente
Luis Carlos Llera TOMIÑO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vazquez

Goián recupera su fortaleza y la playa como espacios de reflexión y lúdicos

24 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Tomiño ha recuperado como espacio de reflexión y lúdico la fortaleza de Goián construida en el año 1673 y ahora quiere convertirla en un europarque con una iniciativa conjunta con Vilanova de Cerveira. «Trataríase de facer unha ponte de madeira no río unindo o parque de Cerveira co noso», explica la alcaldesa de Tomiño, la nacionalista Sandra González. La regidora y el edil de Urbanismo, Uxío Benítez, son conscientes de que el proyecto tendrá que esperar a que la mala situación económica mejore.

El arquitecto Javier Rivas, que fue gerente de Urbanismo en Vigo, ha dirigido el proyecto de recuperación de una zona de unos 60.000 metros cuadrados de una antigua cantera pegada a la muralla. La actuación urbanística, con una inversión de 1,7 millones, financiada por el Ministerio de Cultura ha supuesto la desaparición de una carretera que circulaba por la orilla del Miño y que ha sido transformada en playa fluvial. También se ha creado una zona de juegos, una cafetería provisional de madera y una biblioteca. La actuación urbanística y constructiva se inició en el año 2011 pero no se ha terminado hasta el pasado mayo. Para dinamizar este entorno amullado se creó el Espazo Fortaleza cuyo presidente es el periodista Manuel Campo Vidal y en el se dan cita sociólogos, investigadores y personalidades políticas con objetivo de desarrollar esta zona transfronteriza unida ya por el Ponte de Amizade.

Para mejorar la zona se taló un eucaliptal que ha dado paso a una cancha de futbito y una zona de juegos, columpios etc. Desde ella se desciende a la orilla del río a través de un sistema de terrazas escalonadas que salvan el desnivel existente. Debajo de los voladizos se origina un espacio abierto y multiusos susceptible de acoger desde una conferencia a una exposición y esté pendiente la construcción de un restaurante.

La recuperación de la fortaleza se inició ya en 1994 cuando el Ayuntamiento compró el recinto. «Era de varios propietarios y había viñas dentro de la fortaleza», recuerda el ex regidor popular, José Luis Fernández, padre de la periodista María Rey.