Un respeto a Castrelos

VIGO

30 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Estoy convencido de que a ningún vigués le gusta que su alcalde le tome por tonto. Cuando don Abel Ramón Caballero Álvarez dice que las fiestas de este verano han sido las mejores de la historia que se hayan celebrado nunca jamás, no ya en Vigo sino en cualquier ciudad de Galicia, pienso exactamente eso: a ningún vigués con dos dedos de frente le gustará que su alcalde le insulte.

Desde que se diseñara en 1954, el auditorio al aire libre del parque de Castrelos es sinónimo de grandes conciertos cuando llega la época estival. Para muchas generaciones, se ha convertido en un patrimonio emocional de primer orden. Cuántos gritos, risas y lágrimas habrá dejado en la memoria colectiva... Al auditorio de Beiramar todavía le queda mucho para hacerse un hueco en el corazón de los espectadores, si es que alguna vez lo consigue. Y sí, se puede decir bien alto y con mucho orgullo que ya les gustaría a la mayor parte de las ciudades de España y de Europa poder disfrutar de un escenario tan bonito como Castrelos.

Deep Purple, Mike Oldfield, Caetano Veloso, Oasis, Metallica, Serrat, Zeca Afonso, The Prodigy, Wilson Pickett, Rubén Blades, The Beach Boys, Luis Miguel, Pablo Milanés, Silvio Rodríguez, Nacha Pop, Jamiroquai, Milladoiro, Joaquín Sabina, Alan Stivell, Keane, Patti Smith, Public Enemy, Nika, Pet Shop Boys, Dulce Pontes, El Último de la Fila, Primal Scream, Oscar Peterson, Blondie, Milton Nascimento, Dexter Gordon, Leonard Cohen, Artic Monkeys, Paul Young, Gloria Gaynor, Texas, Gwendall, Radio Futura, Roger Hodgson, The Chieftans, Antonio Gades, Franz Ferdinand, Mercedes Sosa, Blues Brothers y el Bolshoi han pisado, con otros muchos, ese escenario para ofrecer su arte.

El auditorio al aire libre de Vigo, que afortunadamente sigue siendo gratuito para la mayor parte del público, siempre ha sido el termómetro para medir la calidad de los festejos. Por eso es del todo insultante colgarse medallas con el cartel de este verano. ¡Un respeto a Castrelos, por favor! Y, sobre todo, un respeto a la inteligencia de todos los vigueses que están hartos de hipérboles vanidosas.

diego.perez@lavoz.es