Un solitario gol de Juampa desequilibró un partido igualado
28 oct 2018 . Actualizado a las 14:10 h.Un gol de Juampa Barros entregó al Coruxo su tercer triunfo de la temporada y privó al Fabril de hacer bueno el dicho de que a entrenador nuevo, victoria segura. En la gélida mañana de O Vao no se vio demasiado fútbol ni grandes ocasiones, pero sí a dos equipos que propusieron un partido intenso que, tras el descanso, acabó pasando factura a los visitantes, que se quedaron sin fuerza ni ideas, más allá de las de Montiel y Pedro, ante un rival que sacó rendimiento a los cambios y que supo manejarse con el marcador a favor.
Coruxo y Fabril, por motivos diferentes, necesitaban la victoria, y eso se tradujo en un primer tiempo cargado de respeto y de músculo, pero carente de ocasiones claras. Amagó Carlos López en el arranque al intentar irse de dos oponentes, pero se quedó corto ante la meta de un Alberto Domínguez que protagonizó un partido perfecto y que respondió con criterio a cada amenaza herculina. La primera, un córner a favor de su equipo que desembocó en contra del Fabril que obligó al compostelano a salir y cortar el avance.
En su estreno en el banquillo, Sergio Pellicer intentó que sus jugadores llevaran el control, y lo lograron durante algunas fases arropados en un destacado One, que lo mismo cortaba que creaba. Pero el centrocampista no podía detenerlo todo, y en una llegada, entre Mateo y Yebra dieron el primer aviso verde.
La ocasión más clara de todo el primer tiempo la tuvieron los visitantes. Un centro desde la derecha con el balón bajo que Víctor García remató mal entrando solo a portería. El guion del duelo seguía una intensidad muy alta, pero poca continuidad.
La vuelta de vestuarios presagió un cambio. En apenas dos minutos se enlazaron tres llegadas, dos del Fabril y una del Coruxo, que fueron el preludio del único gol del encuentro. Corría el minuto 61 cuando los de Jacobo Montes atacaban por banda derecha. De ahí pusieron un centro al área que Jacobo Trigo, recién ingresado en el terreno de juego, peinó para que Juampa, entrando desde la izquierda, rematase al segundo palo en un perfecto tiro cruzado. Golazo por la vía rápida.
El Fabril intentó que el hachazo no le afectara, apostó por que sus dos puntas amenazasen a los centrales del Coruxo, pero se encontraron con un equipo muy serio que apenas dejó grietas. Y cuando los visitantes las abrían, aparecía Alberto Domínguez, que sacó tres buenos balones a Pedro, mientras Antón de Vicente, reconvertido en lateral tapaba la banda derecha y Trigo cortaba un centro raso de Carlos López que podía llevar peligro.
El Coruxo, con Pablo Aguilera convertido en referencia en punta, intentó cerrar el partido con un segundo gol, pero los fuera de juego y la precipitación que les acompañó desde el arranque en tareas ofensivas, lo impidió. El gol de Juampa fue suficiente.