Pasión por las motos... en miniatura

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

XOAN CARLOS GIL

Fernando Mulet atesora un pequeño museo del motor en su casa de Teis

04 may 2023 . Actualizado a las 00:48 h.

Fernando Mulet es un apasionado por los coches y las motos. Desde que se casó, este hombre de 82 años comenzó a coleccionar objetos en miniatura en su domicilio de Teis. Atesora más de un millar de juguetes y de piezas de colección reunidos durante más de 50 años. «Todo lo fui comprando poco a poco. Iba mucho a Barcelona y a las concentraciones moteras. Lo más raro que veía, lo compraba», afirma.

La colección de Fernando es variada y extensa, y tiene miniaturas de todas las escalas y materiales de construcción. Él mismo ha construido algunas de ellas, utilizando tanto madera como metal. Además, cuenta con una gran cantidad de objetos con forma de coches y motos, como botes de colonia, mecheros, relojes o radios. Una reproducción de una moto Kawasaki es, en realidad, el teléfono fijo que tiene en funcionamiento en su estudio. Compraba cualquier cosa que tuviera la forma de un vehículo. Además siempre le llamaron la atención los mecheros. Su colección se completa con cerca de 300 encendedores de las más diversas formas y tamaños.

Entre los objetos más curiosos de su colección se encuentran unos pequeños coches antiguos de juguete que contenían unas cajas de caramelos que se vendían en la calle Príncipe. «Compraba las cajas de caramelos por el cochecito y las niñas se comían los dulces que había dentro cuando eran pequeñas», recuerda. Hoy en día los tiene cuidadosamente guardados en su casa.

Fernando es muy meticuloso en cuanto a la autenticidad de los objetos de su colección. Asegura que los coches para el coleccionismo deben tener puertas que se abran y se cierren. Las motos deben tener ruedas y suspensiones que se muevan para que sean auténticas. «Si no lo hacen, no son de colección», afirma. Por esta razón, ha sido muy selectivo en la elección de cada objeto.

Hay una pieza que destaca entre todas las demás, y es la primera motocicleta de juguete que funcionaba con pilas. Se trata de una miniatura de una BMW 1.000 con piloto incorporado. La tiene desde hace 60 años y todavía funciona. Esta motocicleta fue utilizada como publicidad por la tienda Motos Ponte en su escaparate de la calle Sanjurjo Badía, y Fernando la conserva como una reliquia.

Otra parte importante de la colección de Fernando son las decenas de motos de carreras que han ganado diferentes competiciones internacionales, como el campeonato del mundo de moto GP, junto con la fotografía del piloto que lo ganó. La más reciente es la Yamaha que fue utilizada en 2021 por el piloto Valentino Rossi antes de su retirada, y Fernando la tiene rotulada con el número 46, que el gran deportista siempre utilizaba en sus carreras.

Otra curiosidad que conserva con mucho cariño es una reproducción de un bólido de Emerson Fittipaldi. «Este es el propio coche que utilizaba, tenía el alerón que bajaba o subía», presume.

A pesar de que Fernando ha dedicado gran parte de su tiempo y esfuerzo a la búsqueda de cada objeto de su colección, ahora ha decidido no comprar más debido a la falta de espacio en su casa. Fernando también ha tenido muchas motos auténticas.

Este jubilado que llegó de Cataluña para trabajar como tubero en la antigua fábrica de los astilleros de Barreras llegó a tener más de medio centenar a lo largo de su vida. Su pasión le llevó a correr las 24 horas de Montjuit. Sin embargo, el año pasado tuvo un problema de salud que le hizo perder movilidad, y desde entonces se mueve en un pequeño coche eléctrico por las calles de Vigo.