El concierto del centro sanitario con el centro, que celebra 50 años, caduca en agosto y no se ha negociado uno nuevo
20 dic 2023 . Actualizado a las 03:22 h.El Hospital Ribera Povisa recibirá el próximo año la medalla de oro de la ciudad de Vigo, según ha anunciado esta mañana el alcalde, Abel Caballero. La medalla es la principal distinción que otorga el Concello de Vigo, a la que se unen los vigueses distinguidos. Estos reconocimientos deben ser aprobados por el pleno del Ayuntamiento y luego se entregan en una gala que en teoría coincide con la Reconquista (28 de marzo) aunque es habitual que la fecha se modifique.
Caballero ha hecho una defensa cerrada del hospital del grupo Ribera durante la celebración de su 50 aniversario. Ha destacado su papel en el cuidado de la salud y también como empresa en la generación de empleo, con 1.500 trabajadores. «Cuando estás allí estás en una parte de tu casa», ha dicho Caballero.
Povisa es el hospital de referencia para 120.000 personas del área sanitaria de Vigo, que tienen la posibilidad de elegir entre este y el Cunqueiro. Lo es gracias a un concierto con el Servizo Galego de Saúde cuya última prórroga caduca el próximo agosto. Del futuro a partir de entonces no se sabe nada, aunque la Consellería de Sanidade ha reconocido que negocia un nuevo acuerdo, si bien no hay plazos. Por lo tanto, la incertidumbre planea sobre el hospital, pues el Sergas representa alrededor del 70 % de su actividad (el resto es privada).
La entrega del galardón de la ciudad llegará pocos meses antes del vencimiento del concierto, lo cual es una manera de reconocer que el sistema sanitario debe seguir contando con Povisa.
En el acto de celebración también ha participado la secretaría xeral de la Consellería de Sanidade, Natalia Lobato, que ha alabado la calidad del hospital pero que no ha dado ninguna pista acerca del futuro concierto.
El presidente del grupo Ribera, Alberto de Rosa, ha ensalzado el papel de Povisa como «pionera de la colaboración público-privada» y ha hecho un llamamiento a «trabajar juntos para ofrecer cuidados». Después del acto, De Rosa ha aclarado que el grupo tiene un plan de inversiones para su hospital vigués, que contempla la renovación tecnológica. Acerca de las negociaciones para el nuevo concierto, el empresario ha dicho que «son momentos inciertos desde el punto de vista político». Las elecciones gallegas se celebrarán pronto (aún no se conoce la fecha, pero Rueda ha reconocido que serán antes del verano) y el concierto con Povisa es una competencia directa de la Xunta. «No tenemos prisa», dijo, si bien el calendario fija agosto como tope.
La recién nombrada gerente del hospital, Ángela Guerra, ha desgranado los 50 años de historia del hospital subrayando la voluntad de estar en la vanguardia desde su fundación por los médicos Darío Durán (radiólogo), Alberto Guitián (obstetra), Manuel Sas (otorrinolaringólogo), José Troncoso (traummatólogo) y Eduardo Vázquez (cirujano general). «Asumo en primera persona la gran responsabilidad de elevar este hospital a nuevas cotas», dijo la gerente.
Como son cinco décadas de vida, el hospital ha querido a un profesional que representase cada decenio. Fueron Aureliano Dávila, que fue jefe de servicio de medicina nuclear; el Centro de Estudios Povisa representado por su jefe de estudios, Vicente Suárez; Francisco Tardáguila, jefe de servicio de radiología; Roberto Valdés, jefe de servicio de otorrinolaringología; y Mónica Alonso, responsable del servicio de limpieza. Tardáguila ha improvisado unas palabras: «Llevamos diez años de un concierto horrible que nos está llevando a la ruina», dijo, al tiempo que reivindicó que «Povisa es un hospital contracorriente», porque fue capaz de crecer y de obtener prestigio con muchos elementos en contra.