Las secuelas del cáncer: «Estoy deseando conseguir un empleo»

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Judy se formó como cocinera y tiene una diplomatura en Empresariales, pero tras superar un tumor de mama, no encuentra trabajo

04 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando le diagnosticaron un cáncer de mama invasivo, en el 2019, Judy Arboleda (entonces, 44 años; ahora, 48) no tenía un empleo, pero no le faltaba el trabajo: tenía tres hijos, el pequeño de cuatro, y había consagrado su vida a cuidarlos. Era una mujer joven y el diagnóstico fue un shock: «Fue un tortazo tremendo, porque yo no tenía antecedentes y me cuidaba, no fumo, no bebo...».

La operaron, la trataron con quimioterapia y hoy se considera curada. «Pero después de todo el proceso, lo que necesitamos es volver a la vida, así que me puse a buscar un empleo. Ya era mi deseo antes de que se presentase la enfermedad. Como el tratamiento salió bien, me dio fuerza y ánimo para buscarlo», cuenta. No fue fácil. Ella tiene una diplomatura en Empresariales que obtuvo en su país natal, Colombia, y que está homologada. Pero reconoce que la falta de experiencia laboral y su edad ponían la tarea cuesta arriba. Por eso, decidió formarse y obtuvo un certificado profesional en cocina. Claro que el cáncer fue una dificultad añadida.

Judy logró un puesto en un restaurante grande de Vigo. «Pero había que coger mucho peso. Estuve intentándolo mucho tiempo, pero me di cuenta de que aquello iba contra mi salud». Le habían recomendado que no cogiese grandes pesos, porque le habían extirpado ganglios de un brazo y eso le provoca riesgo de linfedema (acumulación de líquido).

«Tuve que renunciar, porque era decidir entre la salud y el trabajo. Fue muy triste dejarlo, yo no quería, porque lo había conseguido y las condiciones estaban bien», explica.

No ha tirado la toalla a entrar en el mercado laboral. «Estoy en ello, tengo muchas ganas de encontrar un empleo», expresa. Cuenta con la ayuda de entidades como la Asociación Española contra el Cáncer o Cogami (tiene una discapacidad reconocida). Se considera recuperada del tratamiento médico, si bien tras el cáncer de mama se administra a las pacientes una terapia hormonal para reducir el riesgo de reaparición.

Pero en este momento, la principal secuela del cáncer es que no encuentra un empleo. La AECC estima que sufrir un cáncer aumenta un 34 % el riesgo de desempleo.