Realojan a una pareja y cierra una empresa por el desplome en Beiramar

L.C.. Llera / E.V. Pita VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

El juzgado abre una investigación para ver si se produjo un homicidio por imprudencia

28 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El derrumbe de parte de un edificio en Beiramar ha obligado a cortar el callejón de acceso donde existe una vivienda en la que vive una pareja mayor que ha tenido que ser realojada en casa de familiares. El corte efectuado por la policía mediante dos cintas de seguridad también ha obligado a cerrar temporalmente una empresa de suministros industriales, Jarcias y Eslingas, que confía poder reanudar su actividad en los próximos días.

El Concello de Vigo retirará del edificio siniestrado en Beiramar, donde murió un bombero, los sillares y piezas que tengan riesgo de desplome. Lo hará a partir hoy de forma subsidiaria y lo notificará al juzgado y a la propiedad de la casa de dos plantas para que esta se haga cargo de los gastos. Varios técnicos de Urbanismo y de la empresa Resigal acudieron ayer a primera hora al callejón de Beiramar, a la altura del 127 donde el sábado se hundió parte del tejado de una casa y también algunas vigas y piedras de la zona superior, una de las cuales golpeó mortalmente al funcionario fallecido.

La concejala de Urbanismo, María José Caride, subrayó que no habían tenido ningún aviso de que el edificio pudiese caerse. Caride que manifestó sus condolencias a la familia del bombero fallecido Sergio Sanlés. Caride ha precisado que no existía «ningún expediente abierto en el departamento de Urbanismo por este edificio», sino que se abrirá a partir de ahora. Mañana se procederá a la retirada de escombros y la información recabada por los técnicos de Urbanismo será remitida al juzgado que investigará lo sucedido y tendrá que dilucidar las presuntas responsabilidades de los acontecido si las hubiese. Ahora, según la concejala de Urbanismo, se trata de «evitar cualquier peligro». Mientras tanto en la zona continúan las obras de humanización de la avenida Beiramar.

El Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo ha ordenado a la policía investigar, como se suele hacer habitualmente, si falló algo cuando los bomberos que accedieron al edificio derrumbado en Beiramar en el que murió un miembro del retén de Coruxo el sábado. Quiere saber si los intervinientes tuvieron algún problema y en qué circunstancias estaban desarrollando su trabajo.

El Tribunal aperturó diligencias por un fallecimiento no natural y por el atestado judicial. Colaboran en el estudio la Policía Científica, la Inspección de Trabajo y el Instituto de Seguridade e Saúde Laboral de Galicia (ISSGA). Los resultados podrían derivar luego hacia una causa por homicidio por imprudencia en el ámbito de lo laboral o en un delito de los trabajadores. Habría que ver qué persona o institución debe responder por los hechos. El caso está abierto.