En colaboración con Bellas Artes, la Fundación exposición un conjunto de obras cuyo componente fundamental es el sonido
25 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Ollo á orella es la nueva propuesta expositiva fruto de un convenio de colaboración entre la Fundación Laxeiro y la Facultad de Bellas Artes y, al mismo tiempo, es una pieza incluida en el programa Vertixe12. Así que se trata de un proyecto presidido por el sonido, enmarcado en una partitura única que interpretan ocho artistas.
Ignacio Barcia es el comisario de la propuesta en la que participan Ana Gesto, Elena Matamoro, Berio Molina, Macarena Montesinos, Acacia Ojea, Alejandra Pombo Su, Anxo Rodríguez y Ulobit (Xoan Xil, Horacio González, Ariel Ninas), todos con alguna vinculación a Bellas Artes.
Todos estos artistas coinciden en utilizar el sonido como un componente determinante en su trabajo, que recorre ámbitos diversos, como el arte sonoro, acciones, imágenes, vídeos, instalaciones, esculturas e, incluso, música.
Como dice el comisario «estamos hablando del sonido que se escucha, del sonido que se mira, se presenta, se intuye, se recuerda. El sonido como material y el sonido como significante». Pero si el sonido es algo intangible, en esta exposición también se pone de relieve el propio lenguaje escultórico de las piezas. Un pentagrama se convierte en una pieza tridimensional y las ondas del sonido se reflejan en un gráfico.
El resultado es una muestra heterogénea de trabajos de artistas con proyectos muy diferentes, pero que se conjugan con facilidad y coherencia, reunidos por un cierto aire de familia que los envuelve, mediante el establecimiento de relaciones que modifican el espacio expositivo, no solamente en su materialidad, sino también en su configuración sonora.
«El proyecto propone una aproximación a la experiencia estética mediante conexiones entre lo visual y lo auditivo, una experiencia próxima al fenómeno de la sinestesia a la que su título, de alguna forma, quiere hacer referencia: Ollo á orella es una invitación a la contemplación que no se limita al hecho visual, sino que se extiende al hecho sonoro, pero también a un acercamiento a lo visual», concluye el comisario.