Cristina Cantero: «Creo que tengo fuerzas para seguir, pero estoy tan triste que no lo sé»

X. R. C. VIGO

VIGO

XOÁN CARLOS GIL

La entrenadora deja la puerta abierta a continuar para devolver al equipo a la élite, «pero es tan difícil, que hay que tener la mente limpia para hacerlo bien»

22 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Cristina Cantero Ostos (Cabra, 1978) no esconde que el descenso a Liga Challenge es el palo más grande que se ha llevado en toda la vida en el Celta. La viguesa de adopción dice estar de luto, analizando las causas del mal año, marcado por la salida de dos jugadoras que descompusieron al equipo y por el bajo rendimiento de algunos mimbres, pero al mismo tiempo, deja la puerta abierta a su continuidad una vez que ponga en orden todas sus ideas. Tiene claro que el reto de volver a Liga Femenina es muy difícil y el primer paso es tener la mente limpia para hacerlo bien.

—¿Cómo está?

—Es un momento muy difícil, hoy quizás más tranquila que ayer. El peor día fue el domingo. Estoy intentando asimilar lo que ha pasado todo el año y lo vivido. Hubo muchos problemas, muchas cosas intentadas que no han salido, muchas decisiones equivocadas y, con todo eso, llegas al último partido con opciones, que igual no nos hubiésemos merecido ni eso, pero llegas y no sale. No siempre va a salir como el año pasado. Como jugadora, viví dos situaciones de esas y salieron de cara y ahora tocó que no y hay que reponerse, no queda otra.

—¿Se lo temía tal como era la última jornada?

—Sí. Intenté mentalizarme de que podía pasar. Sabía que para nosotras era muy difícil ganar, porque llegábamos muy justas y Valencia se jugaba la segunda plaza. Teníamos que hacer muchísimas cosas muy bien para ganar. Era consciente de que el partido que nos podía dar más chance era el de Lugo. Fue un cara o cruz y cayó cruz.

—¿Para usted cuáles fueron las claves del descenso?

—Hemos tenido muchos problemas con la plantilla a nivel de acertar con las jugadoras. Las dos salidas de la nigeriana (Blessing) y la americana (Maxwell) nos hicieron mucho daño porque nos descompusieron un poco el equipo, por lo que hubo que reconstruirse y cambiar roles y el mercado no nos ha dado mucho margen. Luego, vinieron las lesiones, como la de Quinn, que nos hizo mucho daño. También que alguna jugadora que fichamos al principio pensamos que nos iba a dar más rendimiento del que nos dio. Son variables que vas sumando y acabas haciendo un cóctel molotov que no funciona.

—Con la nula aportación de Blessing estuvieron sin juego interior media liga, además.

—Fue un lastre muy grande. Tuvimos que ajustar los roles de las demás y todo el mundo estaba fuera de lugar. Creo que Cooper hizo un desgaste muy fuerte esos cuatro primeros meses y luego se nos cayó físicamente. Fuimos moviendo la manta, pero siempre se nos quedaba algo descubierto y la plantilla no tenía tanta calidad como para tapar esos agujeros tanto tiempo. Blessing estaba llamada a ser una pieza clave y al no funcionar, un equipo como nosotros tiene un problemón.

—¿Se siente con fuerzas para seguir?

—Ahora hay que tomarse un tiempo de pensar, de recapacitar bien las cosas, de hablar con el presidente, los directivos y el cuerpo técnico. Entiendo que sí, pero ahora mismo estoy tan triste que no lo sé.

—¿Le mueve la intención de devolver el equipo a la élite?

—Seguramente sí. No solo devolver al equipo, sino al club. Me muevo muy por el club, por lo que es, por la gente que trabaja y es duro.

—¿El club se puede resentir de esto o los cimientos son tan sólidos que no tiene nada que ver?

—Los cimientos son muy sólidos. Tenemos las cosas claras, buenos patrocinadores, la directiva es buena. Es cierto que hay que reconstruir la plantilla entera, pero si nos hubiésemos quedado, la tendríamos que reconstruir igual, todos los años es lo mismo. Yo claro que quiero dejar el equipo arriba, pero es tan difícil que hay que tener la mente limpia para hacerlo bien.

—¿Comparte la manida frase de que a veces es mejor dar un paso atrás para luego dar dos adelante?

—Muchas veces sí. Ferrol bajó dos veces y mira dónde está ahora. Creo que tenemos ejemplos claros de otros clubes y otras situaciones que nosotros no hemos vivido y que son focos de luz. La idea es estar lo antes posible arriba otra vez, creo que está claro por parte del club pero ahora mismo tienes un período de duelo, sabes que has defraudado a gente y que no has conseguido el objetivo. Quizás este es el palo más grande que llevo con el club y ahora mismo está todo como muy reciente.