El juez ordena indemnizar con 51.000 euros a un motorista que tuvo un accidente por un socavón en Vigo

a.m. VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

El bache en plena calle Colón fue calificado como «peligroso»  y condena al Concello

07 may 2025 . Actualizado a las 02:11 h.

Un socavón de 25 centímetros de diámetro y hasta diez de profundidad en la céntrica calle Colón ha acabado costándole al Concello más de 51.000 euros. El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Vigo ha dictado una sentencia que estima parcialmente la demanda de un motorista que sufrió una aparatosa caída en ese punto debido al mal estado del pavimento. El juez concluye que la administración local es responsable del accidente por no haber conservado la calzada en condiciones de seguridad, y le impone el pago de una indemnización de 51.123,65 euros, más intereses legales.

El accidente ocurrió el 2 de diciembre de 2021. El conductor circulaba con normalidad por la calle Colón cuando la rueda delantera de su motocicleta se introdujo en un socavón ubicado en la línea de separación de carriles. La maniobra resultó incontrolable: el motorista salió despedido por encima del vehículo y sufrió graves lesiones. Un testigo presencial declaró que el conductor no realizaba ninguna maniobra imprudente, y el atestado policial descartó responsabilidad por su parte.

Las consecuencias físicas fueron severas. El accidentado sufrió una fractura compleja del calcáneo derecho, fractura y luxación del codo y una fractura del escafoides en la muñeca. Tuvo que ser operado en dos ocasiones y se sometió a un largo proceso de rehabilitación en el Hospital Meixoeiro, con un total de 110 sesiones entre febrero de 2022 y junio de 2023. En total, el período de convalecencia superó los 500 días, con distintos grados de perjuicio personal reconocidos por el informe médico.

La sentencia considera probado que el socavón no fue producto de un daño repentino, sino de un desgaste progresivo, con grietas visibles a su alrededor.

Bache peligroso

Fotografías y peritajes confirmaron que el deterioro ya era notable antes del accidente. El informe pericial aportado incluso por la propia aseguradora del Concello concluyó que el agujero tenía dimensiones peligrosas y se situaba en una vía con tráfico frecuente, por lo que requería actuación. El juez estima que el Concello incurrió en responsabilidad patrimonial por incumplir su deber legal de conservación de las vías públicas, y califica como contraria a Derecho la desestimación presunta de la reclamación administrativa que la víctima había presentado meses antes del litigio. La sentencia ordena al Concello el pago de la indemnización calculada, que incluye daños personales, lucro cesante y bienes materiales dañados, como prendas de vestir.