
Caballero anuncia el segundo plan de edificación forzosa
07 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Vigo ha dado un nuevo paso en su estrategia para revitalizar el Casco Vello con el anunci del segundo programa municipal de edificación forzosa, que afectará a 24 solares y edificios abandonados. El objetivo es obligar a los propietarios a edificar o permitir que lo haga un tercero mediante subasta, con el fin de erradicar el abandono prolongado y consolidar la estructura urbana del barrio histórico. El alcalde, Abel Caballero, subrayó que «en las zonas del Casco Vello hay un número significativo de solares o de edificios en ruinas que no pueden continuar en esa situación».
La medida, según explicó, se basa en la legislación urbanística que obliga a los propietarios a conservar, utilizar y edificar sus inmuebles, y se plantea como un instrumento para frenar la degradación en uno de los entornos más emblemáticos de la ciudad.
El nuevo listado de inmuebles incluye 15 que se incorporan por primera vez y otros nueve que ya figuraban en el primer plan municipal impulsado en 2017, pero que no llegaron a ejecutarse. En total, 24 propiedades que serán objeto de un proceso de rehabilitación urbanística a través del procedimiento de inclusión en el Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas.
El procedimiento, actualmente en fase de finalización de expedientes, será aprobado inicialmente en las próximas semanas. Tras su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia, se abrirá un periodo de información pública para la presentación de alegaciones. Superado ese trámite, se procederá a su aprobación definitiva. A partir de ese momento, el Concello dispondrá de un año para sacar a subasta los solares en los que no se haya producido ninguna actuación por parte de los propietarios. «El que gane la subasta los podrá edificar», detalló el alcalde.
El primer plan de edificación forzosa activado por el gobierno local en el 2017 incluyó 38 inmuebles, de los cuales casi el 60 % fueron rehabilitados o edificados tras su inclusión en el registro. La medida supuso una transformación visible en calles históricas. Caballero valoró el resultado como un éxito, ya que permitió intervenir sobre propiedades que llevaban entre 10 y 30 años sin desarrollar, deteriorando el entorno urbano. En algunos casos, los propios propietarios reaccionaron al verse incluidos en el registro y procedieron a edificar: en otros, el Concello los tuvo que subastar.
«No vamos a dejar que solares que llevan ahí diez, 15, 20 y 30 años en ruinas y sin edificar permanezcan en esa situación que degrada todo el Casco Vello», advirtió el alcalde.