La Xunta advierte del empeoramiento de las válvulas de la presa de Eiras, ya con fugas de agua

La Voz VIGO

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M.MORALEJO

Augas de Galicia comunicó la situación a la concesionaria municipal Aqualia. Caballero exige la reversión de la gestión del embalse

20 nov 2025 . Actualizado a las 11:04 h.

La Xunta de Galicia advirtió ayer de un empeoramiento en el estado de las válvulas de la presa de Eiras. Tras una revisión, los técnicos constataron que una de las piezas dañadas presenta ya una fuga visible de agua. El Gobierno autonómico considera que la situación es de «máxima urgencia» y ha avanzado que este jueves adoptará una decisión definitiva sobre la actuación a acometer, dado que se está comprometiendo el abastecimiento de agua «a Vigo e ao resto dos concellos que dependen da presa, con máis de 400.000 persoas afectadas».

Durante la inspección visual realizada en la mañana del miércoles, los técnicos observaron cómo un pequeño poro en la segunda válvula afectada detectado el pasado mes de octubre se ha abierto, pasando de una simple humedad a un chorro de agua. La incidencia se identificó sin necesidad de manipular la válvula, por lo que la concesionaria municipal Aqualia no estuvo presente, aunque fue informada de inmediato, advierten desde la Xunta. Insiste en que el Concello de Vigo mantiene en exclusiva la competencia de abrir y cerrar las válvulas desde el año 2023, lo que condiciona las operaciones de la concesionaria.

Ayer por la mañana, constinuó el cruce dde acusaciones entre Administraciones. «A Xunta ten que saír de novo ao rescate dos desastres da xestsión de Caballero», afirmó la delegada autonómica, Ana Ortiz. El alcalde de Vigo, por su parte, cargó duramente contra el Gobierno autonómico, al que acusa de haber perdido ocho meses en la resolución de los problemas detectados en la presa de Eiras. Abel Caballero dijo que la Xunta es responsable de la infraestructura desde enero del 2023.

El alcalde reclamó la reversión de la gestión del embalse al Concello, tras alegar que la Administración autonómica incurre en una «negligencia gravísima». Para Ana Ortiz, esta reclamación solo añade ruido y alimenta la confrontación. Caballero asegura que desde que el Ayuntamiento entregó la presa no se ha realizado ninguna inspección. Según explicó, hace ocho meses se detectó una válvula defectuosa, pero a día de hoy ni siquiera encargaron las piezas necesarias para su sustitución. «Es de una gravedad extrema porque han dejado pasar ocho meses sin actuar», denunció. «Si nos la devuelven, nos encargamos de todo desde mañana mismo», manifestó.

Respecto a la propuesta de la Xunta de instalar un bypass como solución técnica, el alcalde se mostró de acuerdo. Sin embargo, criticó que no se haya presentado ningún proyecto formal. Subrayó que la ciudad dispone de reservas de agua para 36 horas, por lo que el bypass sería necesario únicamente para otros municipios sin esa capacidad, con los que la Xunta aún no ha contactado.

El Concello paga un canon anual de 600.000 euros desde el 2017 para que la Xunta determine y ejecute las obras necesarias en la presa. «No hay excusas; son ineficientes y negligentes», aseveró. Caballero exigió la dimisión de la conselleira de Medio Ambiente, Ánxeles Vázquez, como responsable directa.