
El Concello marcará las sendas peatonales para dar seguridad a los usuarios
14 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Las restricciones de vehículos en las playas de Cangas puestas en marcha hace apenas un par de semanas se acompañarán en los próximos días de nuevas medidas. El objetivo es reforzar la señalización, insuficiente, según han demostrado los primeros días. Las indicaciones de tráfico actuales están colocadas en las intersecciones y prohíben circular desde esos puntos excepto a los vehículos autorizados.
A lo largo de esta semana se pintarán con líneas amarillas los tramos de viales en los que no se puede aparcar y otras marcas blancas señalizarán la calzada para evitar que los vehículos invadan las cunetas y se pueda sancionar al conductor que lo haga. El Concello acaba de adjudicar los trabajos.
A continuación, posiblemente la siguiente semana, se marcarán las sendas peatonales para garantizar la seguridad de los peatones. Con las restricciones de vehículos a las proximidades de las playas ha aumentado de forma considerable el número de personas que se desplazan a pie desde la zona en la que empieza la prohibición de avanzar en vehículo.
«La gente tiene que entender que es necesario adoptar medidas restrictivas por su seguridad, porque es un año atípico», explica el alcalde Xosé Manuel Pazos. El hecho de que los caminos que conducen a los arenales sean muy estrechos hacía más complicado poner un aforo en las playas. Los usuarios no podrían conocer la situación hasta llegar a la arena, por lo que no se evitaría la masificación en las carreteras y se producirían tapones.
«Un domingo del pasado verano se llegaron a registrar picos de 18.000 vehículos en la autovía; ¿dónde se metería toda esa gente ahora¿», comenta Pazos.
Deja claro que lo que se pretende con la restricción de coches en las inmediaciones de las playas de Cangas es evitar que se masifiquen. «La valoración de estos días es moderadamente positiva. Es imposible controlar persona a persona y ver si no respetan las señales o si las boicotean, como sucedió este fin de semana», añade el alcalde.
En realidad, la decisión de restringir los coches en las playas no es más que una vieja demanda de los vecinos, que veían cada verano masificados los accesos a sus casas. El Concello ha aprovechado las medidas de prevención del coronavirus para matar dos pájaros de un tiro: sacar vehículos de los caminos y bañistas de los arenales.
El pasado fin de semana la Policía Local impuso 30 sanciones a otros tantos coches, no por carecer de tarjeta de aparcamiento, sino por estar mal aparcados.
La tarjeta se expide a personas con segunda residencia en el municipio o que pagan el impuesto de circulación en el Concello. Los vecinos empadronados tienen vía libre para acudir a las 38 playas de Cangas. Los que no tienen permiso solo pueden ir a cinco. Se trata de Rodeira, Menduíña, Nerga, Vilariño y una tramo de Liméns.